En entrevista con KCH FM Radio y KCH TV, el Econ. Andrés Robalino Jaramillo, director Ejecutivo de la Cámara de Industrias, Producción y Empleo (CIPEM), de la ciudad de Cuenca, conversó sobre el acuerdo comercial entre China y Ecuador.
El Tratado de Libre Comercio entre Quito y Beijing entró en vigencia el 1 de mayo del 2024.
El director Ejecutivo de la CIPEM manifestó que, en esencia, el Ecuador necesita acuerdos comerciales por estar dolarizado.
Ecuador es un país que requiere exportar e incrementar sus exportaciones a un porcentaje importante, más aún cuando la economía y el mercado nacional están en un proceso regresivo bastante complicado y las industrias nacionales, agroindustrias, requieren buscar otros mercados. La exportación es una salida y una solución al problema que tiene el país, que viene cargando desde el segundo semestre del año pasado.
“Estando eso claro”, indicó Robalino, “debemos estar consientes que al abrir nuestros mercados tenemos que negociar con todos los países que puedan ser nuestros socios comerciales o que son nuestros socios comerciales y podamos repotenciar”.
Ahí, justamente, China, Estados Unidos, la Unión Europea y muchos otros países latinoamericanos, de la Comunidad Andina, son nuestros principales socios comerciales.
Con China, eminentemente ha sido mucho más la comercialización de importaciones, pero se tiene una potencialidad en productos agroindustriales, especialmente para poderlos exportar.
Ha sido muy atacado el acuerdo comercial con el gigante asiático. Obviamente ha sido un tema un tema muy sensible para el sector industrial ya que la mayor cantidad de productos de China que llegan al Ecuador son productos manufacturados que compiten con el producto ecuatoriano.
Robalino mencionó que también debemos estar conscientes que un acuerdo comercial es una herramienta económica, una herramienta comercial. No es la solución de los problemas y ahí es donde el país y el Gobierno Nacional debe tener en cuenta de lo que debe solucionar para que, no solamente los productos chinos, sino de cualquier otro país que no cumplan con las reglas nacionales, no deban ingresar.
El problema de Ecuador es que no controla el producto de mala calidad, su facturado o con una triangulación del comercio que llegan y que, cuando ingresan al país sin todas estas aprobaciones y cumplimientos normativos, lo hacen con unos niveles de competencia mucho más bajos en temas de precios y por lo tanto es imposible poder competir con estos productos chinos.
Esto es lo que está afectando la industria nacional, no es un efecto del acuerdo comercial.
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EG