Expertos en derechos humanos respaldados por Naciones Unidas afirman en un reporte publicado el miércoles que las fuerzas israelíes y los insurgentes palestinos cometieron violencia sexual y de género durante los primeros meses de la guerra entre Israel y Hamás.
En una detallada crónica de los hechos que ya había sido reportada en su mayoría por los medios de comunicación, los expertos independientes dijeron que ambos bandos cometieron crímenes de guerra y que Israel habría cometido también crímenes de lesa humanidad.
Israel, que se ha negado a cooperar con el panel y lo acusó de parcialidad, rechazó las acusaciones.
El informe, que abarca el periodo comprendido entre el asalto insurgente del 7 de octubre y finales del año pasado, expone una serie de supuestas violaciones de derechos y crímenes cometidos por ambas partes durante el conflicto. Indicó que las tropas israelíes habrían llevado a cabo actos como inanición forzada, homicidio o asesinato intencionado, castigos colectivos y ataques intencionados contra civiles, y que los brazos militares de Hamás y otros grupos armados palestinos serían responsables de asesinatos, malos tratos deliberados a civiles y toma de rehenes.
La frecuencia, prevalencia y gravedad de los delitos sexuales y de género contra los palestinos por parte de las fuerzas de seguridad israelíes durante el periodo analizado eran indicios de que algunas formas de este tipo de violencia “forman parte de los procedimientos operativos”.
A pesar de que el brazo armado de Hamás negó haber cometido violencia sexual contra mujeres israelíes, el reporte sostiene que los expertos habían documentado “casos indicativos de violencia sexual” contra mujeres y hombres cerca del emplazamiento de un gran festival de música, un puesto militar avanzado y varios kibbutzim atacados por los asaltantes.
El Consejo de Derechos Humanos, respaldado por la ONU, encargo en 2021 al grupo de expertos que investigara las violaciones de derechos y abusos de derechos humanos en Israel y las zonas palestinas que controla. Dirigidos por Navi Pillay, exjefa de derechos humanos de la ONU, son expertos independientes y no representan a la entidad en sí. Israel se ha negado a cooperar con el panel.
La misión diplomática israelí en Ginebra respondió que el informe “intenta de forma escandalosa y repugnante establecer una falsa equivalencia entre los soldados de las fuerzas israelíes y los terroristas de Hamás en lo que respecta a los actos de violencia sexual” y reiteró sus antiguas críticas de discriminación antiisraelí por parte de los expertos.
El reporte y la respuesta de Israel es la última señal del creciente distanciamiento entre la ONU y sus instituciones afiliadas y el gobierno del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, por su respuesta a la letal incursión y toma de rehenes por parte de grupos insurgentes palestinos el 7 de octubre.
Fuente: Infobae