En entrevista con KCH FM Radio y KCH TV, dialogó el Dr. Luis Gallegos, excanciller de Ecuador, sobre el conflicto diplomático entre Ecuador y México, tras la irrupción de la Policía Nacional en la embajada mexicana en Quito, el pasado 5 de abril.
Este es un tema complejo, que no es de fácil resolución si no hay un acuerdo y un diálogo entre las partes.
La intromisión por parte de un equipo élite de la Policía en la embajada de México tuvo una repercusión enorme en la comunidad internacional.
El hecho indudablemente ha traído una acción diplomática, política y comunicacional muy intensa de parte de México.
Lo primero que hizo el país azteca, luego de la incursión, fue romper relaciones con Ecuador e iniciar una campaña a nivel internacional, primero en la Organización de Estados Americanos (OEA). El país que pidió la reunión para tratar la incursión fue Colombia, el 10 de abril.
Gallegos considera que Ecuador actuó inteligentemente pidiendo una reunión extraordinaria previa en la OEA, el día martes 9 de abril.
Por 29 votos, la reunión de la OEA hizo una condena enérgica al Ecuador. Se abstuvo el voto de El Salvador y hubo ausencia de dos países: México y Venezuela.
«La ausencia de México es, fundamentalmente, un mensaje de que no quería en ese momento, y hasta hoy en día no quiere una solución negociada», puntualizó Gallegos.
Luego de la OEA, la presidenta de Honduras, Xiomara Castro, convocó una reunión de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), que es un mecanismo en el que todos los países toman decisiones por consenso.
Sin embargo, no todos los países estuvieron en consenso en tener esa reunión, realizándose con muy pocos jefes de Estado y representantes el pasado 16 de abril.
Los países sugirieron que la Celac replique la decisión de la OEA.
Después México inició una campaña en las Naciones Unidas pidiendo la expulsión de Ecuador del organismo, que es «inaceptable», bajo el punto de vista del excanciller.
Inmediatamente, abrió un proceso legal en la Corte Internacional de Justicia, que es complejo y que el día de ayer (30.04.2024), tuvo la presentación mexicana de las medidas cautelares.
Hoy se dio lugar a los alegatos del Ecuador, que fueron que no era necesaria esa audiencia, debido a que Quito sí cumplió con los procesos legales. El juicio de precedentes tampoco tenía valor porque no había el contenido que anuncie que México justifique su accionar de llevar a la Corte, porque ambos países no se han puesto de acuerdo de conformidad con el art. 2 del pacto de Bogotá en el que podían negociar esto directamente.
«En todo caso estamos en un juicio, ha habido una contrademanda», dijo Gallegos y señaló que con sus colegas han pedido la conformación de equipos diplomático-políticos para enfrentar el embate de México y sus coidearios en Naciones Unidas.
México anunció que llevará esto al consejo de Derechos Humanos y a los mecanismos de Derechos Humanos.
El Ecuador tiene que estar atento a eso, por lo tanto, es un tema que va a comprometer capacidades profesionales, recursos, iniciativas y, obviamente, la necesidad y una estrategia combinada político-diplomática y comunicacional, porque México ha logrado posicionar su posición a nivel de los comunicadores del mundo.
Ecuador tiene que hacer una campaña importante para recuperar el nivel de prestigio que requiere porque esto afecta a la representatividad y prestigio reputacional del país.
«Todos nosotros como ecuatorianos queremos que este problema traiga las menores consecuencias para el pueblo ecuatoriano», comentó.
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EG
