La solicitud tiene lugar después de que las relaciones entre Japón y China se deterioraran considerablemente, en parte, debido a que Tokio comenzó a verter más de un millón de toneladas de agua radioactiva procedente de la planta de energía nuclear de Fukushima al océano Pacífico, a lo que Pekín respondió prohibiendo la importación de mariscos japoneses.
El aumento fiscal para el año que viene suma casi un 1 billón de yenes al presupuesto que estaba en 6,8 billones de yenes (unos 46.600 millones de dólares), un incremento que supone alrededor del 13 %, afirma Reuters.
Abastecimiento militar
Dentro de los gastos militares, una parte se destinará a la capacidad logística para desplegar armas y recursos en islas al suroeste de Japón para casos de emergencia.
También se incluye financiación para 3 nuevos buques de desembarco, 17 helicópteros de transporte y equipos especializados para mejorar la capacidad de despliegue, según la solicitud del Ministerio de Defensa.
En este sentido, en una alianza con EE.UU. se destinarán 75.000 millones de yenes (unos 514 millones de dólares) para el desarrollo de misiles interceptores para contrarrestar ojivas hipersónicas, y, en un alianza con Reino Unido e Italia, se destinarán 64.000 millones de yenes (unos 438 millones de dólares) para la construcción de aviones de combate de última generación.
Este sería un gasto récord en defensa tras décadas de una política pacifista; pero las tensiones entre China y Taiwán, además de ejercicios militares por parte de Corea del Norte, han cambiado la forma de pensar de Tokio.
Fuente: RT
