Con cierta cautela recibió el sector productivo nacional la decisión del presidente Daniel Noboa de modificar el horario de toque de queda que regía a escala nacional de 23:00 a 05:00.
La medida adoptada por el mandatario es la semaforización por cantones, de acuerdo con los niveles de riesgo de cada localidad: alto, medio y bajo.
La nueva disposición empezará a regir desde este martes, 23 de enero.
Nivel alto: toque de queda entre de 24:00 a 05:00.
Nivel medio: toque de queda de 02:00 a 05:00.
Nivel bajo: se elimina restricción de tránsito.
Diego Vivero, director ejecutivo de la Confederación de Restaurantes del Ecuador (Corec), sostuvo que, dadas las circunstancias, es bueno para el país porque finalmente es mandar un mensaje de que Ecuador paulatinamente va retomando la normalidad.
Agregó que no era exactamente lo que ellos esperaban, pero sostuvo que entienden que las Fuerzas Armadas toman decisiones técnicas y aspira a que, en los próximos días, se irá reduciendo el horario de toque de queda, pero espera sobre todo que las estadísticas de los delitos vayan disminuyendo.
Se mostró a favor de que algunas instituciones educativas retornen a la presencialidad, tal como lo anunció este martes el Ministerio de Educación.
Para Vivero, la presencia de Noboa en la Feria Internacional de Turismo (Fitur) en Madrid, España, es un buen mensaje de que el país ha tomado acciones contra la delincuencia.
Acerca de las pérdidas por el estado de excepción con toque de queda, Vivero las estimó en Quito en alrededor de $ 200.000 diarios.
A decir de Holbach Muñeton, presidente de la Federación Nacional de Cámaras de Turismo del Ecuador (Fenacaptur), una hora más es una ayuda, aunque no es lo óptimo.
Si el horario será hasta las 00:00, los locales podrán cerrar a las 22:30 para limpiar y que los trabajadores tengan alrededor de una hora para llegar a sus domicilios, mencionó.
Martha Guerrero, que representa a 450 bares y discotecas en la capital, mencionó que la decisión gubernamental no los ayuda mucho, porque la gente empieza a salir entre 21:00 y 22:00, y son dos horas hasta que se inicie el toque de queda en el que no hacen nada.
Más que dar una sugerencia se preguntó: ¿por qué Quito tiene ese nivel de restricción?
Andrés Campaña, concejal de Quito, mencionó que la situación en la capital es crítica, pues hay un 90 % de cancelaciones en hoteles, una reducción del 50 % en las ventas en los restaurantes y 100 % de cierre de bares y discotecas.
Esto, agregó, hace que el sector turístico esté seriamente afectado.
Aspira a que en las próximas horas se pueda regresar a la normalidad, siempre con la presencia de la fuerza pública.
En la industria de eventos como matrimonios, fiestas, reuniones corporativas, restaurantes y otras actividades recreativas, que se iban a realizar en los próximos meses, habrá pérdidas de unos $ 15 millones porque se están suspendiendo y pidiendo devolución de anticipos, reveló Vivero. (I)