El presidente del Consejo Directivo del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), Eduardo Peña, informó que la institución revisa un programa de afiliación para jóvenes de entre 15 y 24 años de edad que podrán empezar a aportar para su jubilación y tener cobertura médica y dental y que con ello se podría reclutar 60.000 y 70.000 afiliados.
La idea es ampliar la base de aportantes con una contribución menor a la de los afiliados voluntarios. Así, el pago para la afiliación en este nuevo producto sería $ 50, cuando los afiliados voluntarios pagan $ 80 mensuales. La propuesta la explicó en una entrevista en Democracia TV.
Además, indicó que los afiliados jóvenes tendrán cobertura médica, dental y que esperan poder atraer entre 60.000 y 70.000 nuevos afiliados en esta categoría en el primer año. Comentó que uno de los problemas de la Seguridad Social, en Ecuador y a nivel mundial es que existen cada vez menos afiliados activos para cubrir a los jubilados. En Ecuador se requiere al menos 8 activos para un jubilado, pero ahora existen cinco para cada jubilado.
Aunque aún no existe claridad sobre cuál será el alcance de este nuevo programa. Desde ya se generan ciertas dudas por parte de expertos en el tema de Seguridad Social.
Para Mauricio Espinel, de la Mesa de Estudios de la Seguridad Social, es positivo que se busque aumentar la recaudación de fondos para financiar la Seguridad Social. Sin embargo, se deben tomar varios factores en cuenta:
- Primero se debería establecer si este producto va a entregar todas las prestaciones que por ley se otorgan a los afiliados. Si fuera así, entonces el pago establecido solo se estaría consiguiendo un poco de liquidez, pero se estaría pateando la falta de recursos para los siguientes años.
- Actualmente, según la ley vigente, explicó que no se puede limitar las prestaciones tanto de jubilación como de salud. Con $ 50 mensuales, y tomando en cuenta que el 10 % sería para salud, ese rubro ($ 5) por salud mensual es muy bajo y no cubre los gastos mínimos. Si solo va a ser salud médica y dental, entonces previamente se debe reformar la ley.
Espinel considera que el problema del financiamiento del sistema pasa por cobrar a todos los que están recibiendo. Esto sería: a los hijos de los afiliados menores de 18 años, a los jubilados y a personas que tienen enfermedades catastróficas. Para ello ya existe un estudio actuarial que establece que si ese costo se cobra a todos los afiliados se debería incrementan en 1,6 % el aporte. Y si fuera voluntario, a quien aceptara hacer atender a sus hijos se le debería subir un 2,4 %. Actualmente las atenciones a los menores le cuestan al IESS $ 380 millones anuales.
Explicó que también se debe cubrir las atenciones a jubilados y podría ser a través de un coaseguro. Este tema había sido planteado, desde la Mesa de Estudios de la Seguridad Social, hacerlo con el Ministerio de Salud. Y se habían adelantado conversaciones con el exministro José Ruales.
En este sentido, también comentó que las soluciones no pasan por tomar medidas parche, sino por reformas estructurales que resuelvan los problemas de los próximos 20 o 30 años. Que no pasa tampoco solo por el pago de la deuda del Estado al IESS. Si se pagaran $ 10.000 millones de esa deuda, eso solo serviría para año y medio de pensiones. Igualmente, que la entrega del Banco del Pacífico que genera $ 100 millones anuales resulta insignificante frente a los altos pagos de pensiones y salud que se deben cubrir. (I)
Fuente: El Universo