Este modelo de avión ha sufrido una cadena de accidentes mortales los últimos años.
Osprey, un avión militar estadounidense, se accidentó el pasado 29 de noviembre en Japón. Este lunes, los equipos de rescate encontraron cinco cadáveres el lunes en la costa de la isla.
“Hoy (lunes), los equipos combinados de Japón y Estados Unidos (…) lograron un gran avance cuando sus barcos de superficie y equipos de buceo consiguieron localizar restos junto con el fuselaje principal de la aeronave accidentada”, declaró la Fuerza Aérea de Estados Unidos en un comunicado.
“Los equipos de buceo pudieron confirmar cinco tripulantes adicionales de los ocho que estuvieron involucrados en el accidente”, indicó.
“Dos miembros de la tripulación de los cinco localizados hoy ya fueron recuperados con éxito por los equipos presentes. Se está realizando un esfuerzo combinado para recuperar a los miembros restantes de la tripulación de los restos del accidente”, añadió.
Los socorristas japoneses encontraron a la primera víctima conocida del accidente del avión CV-22 horas después de la desaparición de la aeronave, que cayó el 29 de noviembre cerca de la isla de Yakushima durante una misión rutinaria de entrenamiento.
Tras el último hallazgo, dos miembros de la tripulación siguen en paradero desconocido.
La cadena pública japonesa NHK, citando fuentes no identificadas, afirmó a primera hora del lunes que se había encontrado lo que parecía ser la parte delantera del avión, incluida posiblemente la cabina.
El Osprey, que puede operar como un helicóptero o como un avión de alas fijas, ha sufrido una cadena de accidentes mortales los últimos años.
A finales de agosto, tres marines estadounidenses murieron en un accidente de un Osprey en el norte de Australia.
El año pasado, cuatro marines estadounidenses murieron en Noruega a bordo de una aeronave de este tipo durante unos ejercicios de la OTAN. (I)
Fuente: El Universo