Pompeya: Ropa de lana en víctimas sugiere otra fecha de la erupción

Un revelador análisis realizado por científicos españoles sobre los restos de las víctimas de Pompeya está sacudiendo los cimientos de la historia romana. El hallazgo principal indica que la mayoría de los fallecidos portaba prendas de lana gruesa al momento del desastre, lo que contradice la creencia de que la tragedia sucedió en pleno verano.

El equipo liderado por el experto Llorenç Alapont, de la Universidad de Valencia, centró su estudio en 14 calcos de yeso localizados en la Necrópolis de Porta Nola. Los científicos determinaron que los ciudadanos vestían capas superpuestas: una túnica y un manto, ambos fabricados con un entramado textil denso, diseñado para proteger del clima o condiciones ambientales adversas.

Científicos españoles analizan la vestimenta de las víctimas y revelan nuevos misterios (EFE/EPA/Luigi Spina /Parco Archeologico)

¿Frío otoñal o protección volcánica?

La presencia de este tipo de tejido en todas las víctimas, independientemente de si se encontraban en el interior de las viviendas o en la vía pública, sugiere que las temperaturas eran considerablemente más bajas de lo esperado para un mes de agosto. Según el informe, el uso de doble capa de lana apunta a que el ambiente no correspondía al calor sofocante de un verano convencional en la bahía de Nápoles.

Alapont sostiene que esta vestimenta plantea dos grandes interrogantes: si los habitantes intentaban protegerse de los gases tóxicos y el calor extremo generado por el Vesubio, o si simplemente respondían a condiciones climáticas atípicas de la época.

Los restos humanos muestran túnicas y mantos más propios del frío que del verano
(Universidad de Valencia)

Evidencias que apuntan a un cambio de calendario

Aunque tradicionalmente se ha fijado el 24 de agosto del año 79 d.C. como la fecha del fin de Pompeya —basándose en los relatos de Plinio el Joven—, existen diversas pruebas materiales que sugieren una realidad distinta. Los investigadores han recopilado indicios que refuerzan la teoría de una erupción en octubre:

  • Hallazgo de frutos de temporada otoñal entre las ruinas.
  • Restos de brasas y estufas domésticas encendidas para calentar los hogares.
  • Vino en pleno proceso de fermentación dentro de las vasijas.
  • Un grafiti de carbón que hace referencia explícita al 17 de octubre.
Factor de análisis Teoría de Agosto Evidencia de Octubre
Vestimenta Poco probable (Calor extremo) Consistente (Ropa gruesa)
Alimentación Frutas de verano Frutos de otoño encontrados
Clima en hogares Sin necesidad de calefacción Uso de braseros domésticos

Las prendas halladas abren el debate sobre las condiciones climáticas previas al desastre (REUTERS/Ciro De Luca/Archivo)

Este estudio, desarrollado por el grupo multidisciplinario ÁTROPOS (especialistas en arqueología, química y bioantropología), utiliza nuevas metodologías para reconstruir los últimos momentos de la ciudad. No obstante, los autores mantienen la cautela, ya que el trabajo aún debe ser sometido a una revisión formal por la comunidad científica internacional antes de reescribir oficialmente los libros de historia.

Mientras no se establezca una prueba histórica definitiva que desplace el relato de Plinio, la ciencia ahora debe explicar por qué los habitantes de Pompeya enfrentarían un supuesto día de verano cubiertos con pesados mantos de lana.

Fuente: Infobae

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