El Bayer Leverkusen venció por 0-2 al Manchester City en Inglaterra. A pesar de la notoria superioridad local, los citizens no fueron efectivos de cara a puerta, mientras que los germanos gozaron de precisión para dinamitar el partido mediante Alejandro Grimaldo y Patrick Schick.
El partido arrancó con el City dominando desde los primeros compases. Los de Manchester movían la pelota con calma, buscando espacios desde la pausa y tratando de desorganizar a un Leverkusen inicialmente replegado. Pronto llegó el primer acercamiento peligroso: a los cinco minutos, tras una jugada embarullada, Aké obligó a Flekken a intervenir con una mano salvadora. Fue un aviso de que el portero neerlandés iba a tener una noche de protagonismo. Aun así, el Leverkusen no se inmutó y se mantuvo compacto, ordenado, esperando su oportunidad. El City acumulaba posesión pero le faltaba profundidad y, sobre todo, acierto en los metros finales. Los alemanes, pese a atacar menos, mostraron una efectividad pasmosa cuando les llegó la ocasión. Y el minuto 24 sería el inicio de las malas noticias para el Etihad.
Grimaldo, el capitán y alma del Leverkusen, cazó un balón suelto en la frontal y conectó una volea perfecta, preciosa, que se coló pegada al poste derecho. Un golazo que, según la narración, “puso el Etihad patas arriba” y dejó helado a un City que, sin Haaland, Foden ni Cherki de inicio, acusaba una falta evidente de pegada. Guardiola, inmediatamente tras el gol, comenzó a dar instrucciones desde la banda, consciente de que el partido se le torcía.
El City intentó reaccionar. Ait Nouri llegó a línea de fondo en el 29’, un centro que nadie remató; luego Reijnders lo intentó desde fuera, sin peligro. Las mejores acciones, sin embargo, volvieron a ser neutralizadas por un gigantesco Flekken, que en los minutos finales de la primera parte tuvo dos intervenciones magistrales: primero desvió un pase peligrosísimo de Rico Lewis y luego detuvo un disparo de Reijnders justo antes del descanso. La primera mitad terminó 0-1, con una sensación clara: el City dominaba, pero el Leverkusen era mucho más certero.
En el descanso, Guardiola movió ficha con un triple cambio: se marcharon Lewis, Bobb y Ait Nouri; entraron Foden, Doku y O’Reilly. El técnico catalán sabía que el tiempo apremiaba y que sin talento diferencial sería imposible darle la vuelta.
Apenas iniciado el segundo tiempo ya calentaba Haaland en la banda. Pero antes de que pudiera entrar, llegó el golpe más duro de la noche. En el minuto 53, Ibrahim Maza puso un centro perfecto y Patrik Schick, ganando en el salto a Aké, remató de cabeza al palo y dentro. Otro gol de pura precisión que dejaba el partido 0-2 y con aroma de sentencia. Según la narración, ese tanto “puso en aprietos a Guardiola” y obligó definitivamente a recurrir a toda la artillería.
En el 61′, Guardiola llamó a Haaland y dos minutos después entraron tanto él como Cherki, sustituyendo a Marmoush y Savinho. El City ganaba presencia ofensiva, pero el golpe psicológico estaba hecho. El Leverkusen, confiado y cómodo, se permitía incluso trenzar largas posesiones y divertirse, mientras el City sufría en cada avance.
Haaland tuvo un par de oportunidades claras en el 74’, primero con una volea desviada y luego con un tiro bloqueado por un rapidísimo Flekken. Badé estuvo imperial todo el encuentro, anticipándose incluso al propio Haaland en un balón que parecía destinado a ser rematado por el noruego. Ni siquiera la entrada de Doku generó el desborde que Guardiola esperaba; las constantes ayudas defensivas alemanas bloquearon sus intentos.
El tramo final del encuentro fue un monólogo de frustración del City. Cherki probó varias veces, incluso con un libre directo que Flekken despejó con puños en el 85’. Pero cada vez que el cuadro inglés parecía acercarse al gol, el portero neerlandés volvía a cerrar la puerta. Mientras, los aficionados ingleses comenzaron a abandonar el estadio a falta de dos minutos, resignados.
Los últimos instantes confirmaron lo inevitable: un City incapaz de revertir la desventaja y un Leverkusen sólido, inteligente y extremadamente eficiente, que se llevó un triunfo enorme por 0-2. Con esta derrota, según las indicaciones del propio directo, Madrid, Liverpool y PSG se acercan peligrosamente a la plaza del City en octavos. Guardiola, pese a recurrir a todo su arsenal, pagó caro haber reservado titulares.
Una noche amarga para el vigente campeón, una noche gloriosa para el Leverkusen.
Vía vavel.com
🔥🫵🏻😱¡DE MAL EN PEOR!😱🫵🏻🔥
📌 Manchester City 🔵⚪️ no pudo en casa y perdió por (0-2) ante Bayer Leverkusen⚫️🔴 en el Etihad Stadium.
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— KCH RADIO 90.9FM (@kchradio) November 25, 2025