El Ministerio de Justicia busca prohibir las actividades del Movimiento Internacional Cívico LGBT, tras pedir al Tribunal Supremo que considere al colectivo una organización «extremista».
Rusia pidió este viernes (17.11.2023) la prohibición del «movimiento público internacional LGTB» por «extremista», en una nueva muestra de la deriva ultraconservadora de Moscú, acentuada desde que empezó la ofensiva contra Ucrania y que varias oenegés tildaron de homófoba.
El Ministerio ruso de Justicia informó de la decisión en un comunicado pero no especificó si se refiere al movimiento en general de defensa de los derechos de las identidades de género y de orientaciones sexuales minoritarias, o a organizaciones de defensa de derechos concretas.
En su comunicado, la institución anuncia que «presentó una reclamación legal administrativa ante el Tribunal Supremo […] para reconocer como extremista al movimiento público internacional LGTB y prohibir su actividad en Rusia».
El tribunal estudiará la petición a partir del 30 de noviembre.
El anuncio del Ministerio de Justicia fue denunciado por organizaciones especializadas.
«El poder ruso olvida una vez más que la comunicad LGTB+ son personas, ciudadanos de este país como de los otros. Y ahora no solo quieren hacernos desaparecer del espacio público sino prohibirnos como grupo social», dijo a la AFP Dilia Gafurova, directora de la fundación «Sphere» de defensa de los derechos de las personas LGTB+ en Rusia.
Putin contra los colectivos LGBT
«Es una medida típica de los regímenes represivos y no democráticos: perseguir a los más vulnerables», añadió, prometiendo «luchar».
El presidente ruso, Vladimir Putin, ejerce desde hace años una política calificada de homófoba o tránsfoba por numerosos representantes de la comunidad LGTB+ (lesbianas, gays, trans, bisexuales y otros) y por oenegés.
Desde que inició su ofensiva contra Ucrania en febrero de 2022, el gobierno multiplicó las medidas contra ese colectivo, presentándose como un baluarte moral frente a la decadencia de Occidente.
Desde 2020, la Constitución rusa precisa además que el matrimonio es la unión entre un hombre y una mujer, impidiendo de facto las uniones entre personas del mismo sexo.
Asimismo, la principal oenegé de defensa de los derechos de personas LGTB+ de Rusia, LGBT-Set («Red LGTB), fue clasificada en 2021 como «agente del extranjero», lo cual entorpece su funcionamiento y la expone a multas e, incluso, a que la prohíban.
En septiembre el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) condenó a Rusia en dos casos por ataques y torturas a miembros de la comunidad lesbiana, gay, bisexual, transgénero e intersexual.