En el desarrollo urbanístico de Chongón se ha concentrado más de la mitad de los recursos que la actual gestión del alcalde Aquiles Alvarez ha dedicado a la obra pública de todo Guayaquil. En los primeros seis meses de su gestión, que se cumplen hoy miércoles 15 de noviembre de 2023, la Municipalidad –el cabildo y sus catorce empresas o fundaciones– ha destinado $ 17,4 millones para obra pública, y de esta suma $ 11 millones (63 %) se asignaron para trabajos de infraestructura en la parroquia Chongón, según una revisión de los procesos –adjudicados y por adjudicar– registrados ante el Servicio de Contratación Pública, Sercop.
La mañana del pasado lunes 13 de noviembre del 2023, una cuadrilla de trabajadores colocaba grandes tuberías de concreto en la avenida principal de las etapas de la urbanización Paseo del Sol, en Chongón, mientras varios letreros daban cuenta de la obra municipal. “Las vías y las obras prometidas para el sector avanzan”, señalaba una pancarta, mientras que otra resaltaba: “Estamos trabajando por Guayaquil, Aquiles Alvarez”.
Esta obra, ubicada en el km 24 de la vía a la costa, situada entre Chongón y Chongoncito, fue adjudicada por la fundación municipal Autoridad Aeroportuaria de Guayaquil a la empresa Grupelsa S. A., en septiembre pasado, por casi $ 700.000. Con los trabajos se busca habilitar el sistema hidráulico para el desfogue de aguas lluvias, y continuar con la construcción de la avenida principal al pie de las urbanizaciones, obra que se contrató en la anterior administración de Cinthya Viteri. “Aquí confluyen dos contratos, el de la avenida, que ya debería estar terminada según los plazos iniciales, y el de las aguas lluvias, que no se había contratado, por eso no se podía terminar la avenida”, comentó
uno de los supervisores de los trabajos.
A esta obra se suman seis más en Chongón, –zona de influencia donde se creará el nuevo aeropuerto de la ciudad–, entre ellas la ‘construcción de la ciclovía, guardavías y trabajos complementarios para el paso elevado junto a la urbanización Los Ángeles’, en el km 22 de la vía a la costa, y que llegaría hasta la vía alterna de ingreso a Chongón y a los planes habitacionales del cabildo, adjudicada por $ 724.000 en septiembre.
Además de Chongón, el 37 % de los recursos destinados por el Municipio a obras públicas ($ 6,4 millones) se ha dirigido a la adquisición de hormigón asfáltico y a la estabilización y protección de la carretera Progreso – San Lorenzo del Mate – Sabana Grande – Puerto Sabana Grande. También al adecentamiento de los cementerios que están bajo su administración, la señalización vertical de la vía Perimetral y las readecuaciones de las oficinas de operaciones de la terminal terrestre y de los Centros de Atención Municipal Integral (CAMI).
El presupuesto municipal comprometido para los primeros seis meses de la administración de Aquiles Alvarez se ubicó en $ 65 millones y comprendió 668 contratos. Sin embargo, la obra pública no representa el primer rubro de inversiones, sino el segundo. En primer lugar se ubican los contratos de mantenimiento de todas las dependencias que conforman la Municipalidad de Guayaquil, y que suman $ 21 millones en recursos, según el portal web del Sercop.
Entre ellos se mencionan, por ejemplo, el mantenimiento del sistema semafórico, cuidado de las áreas verdes, la limpieza de zonas regeneradas y la compra de combustible o neumáticos para los vehículos de la Municipalidad. “Nos vamos a reunir para hacer un balance crítico de los primeros seis meses de gestión y analizar el tema de la legalización de tierras que se prometió en el norte (Monte Sinaí)”, afirmó el director del Observatorio de Servicios Básicos de Guayaquil, César Cárdenas, quien cuestionó la falta de convocatoria del alcalde para tratar los temas importantes de la ciudad. “Hay un déficit de participación ciudadana, hay delegados que son del mismo partido de él en los organismos de participación. El alcalde solo convoca a sus amigos”, comentó Cárdenas.
Este veedor guayaquileño pidió que el alcalde convoque a una mesa de trabajo para analizar la inseguridad que vive la ciudad, un área que dentro de la inversión municipal de la actual administración se ubica en tercer lugar, con $ 9 millones y que, básicamente, comprende la contratación de guardianía de las edificaciones del cabildo y de los parques o plazas que se encuentran bajo su custodia.
Un contrato por $ 965.000 para la adquisición de camionetas 4×2 constan entre las adquisiciones realizadas por la empresa pública municipal para la gestión de riesgos y control de seguridad de Guayaquil Segura EP, y que fue adjudicada a la compañía Omnibus BB Transportes S. A. en septiembre pasado. La compra se hizo mediante catálogo electrónico, por lo cual no fue posible conocer detalles de la contratación.
“Guayaquil, en conjunto con la Zona 8, concentra el 35 % de homicidios a nivel nacional, lo urgente es cómo vincular a los gobiernos locales, en este caso las alcaldías, a reducir los homicidios, y las extorsiones que han aumentado muchísimo”, analiza Renato Rivera, director del Observatorio Ecuatoriano del Crimen Organizado.
Rivera sugiere que los municipios levanten información de las zonas donde se concentran delitos y que se controle la circulación motorizada, que está bajo competencia local, en lugar de “esperar a que el Gobierno central les dé información”, además resalta la urgencia de “más proactividad en materia de seguridad”. “Van dos en una sola moto, uno con casco y otro sin casco, sobre todo en zonas con índices delictivos muy altos. Esos controles se necesitan fortalecer, y esa es una competencia 100 % municipal”, recalca Rivera.
Otras áreas de inversión en este primer semestre comprenden la compra de equipamiento ($ 4,8 millones) y las campañas de comunicación y pautaje de publicidad en medios ( $ 4,6 millones). Casi $ 2 millones se han destinado a la salud municipal, sobre todo para el abastecimiento de fármacos, lentes, sillas de ruedas, pañales, etc.
“En el presupuesto (del 2024), que aprobamos hace unos días, se deja nuevamente rezagado todo lo que es atención al ser humano en su integralidad. Considero que es fundamental que se invierta un poco más en el ciudadano y dejemos un poco el asfalto”, comentó Wilma Torres, presidenta de la Asamblea Local Ciudadana de Guayaquil.
El asfaltado de las calles, la participación ciudadana y las ferias de comerciantes, –en cambio–, es lo que el dirigente Luis Cubillos destaca de la gestión del nuevo alcalde. “Participan poco menos de mil comerciantes, eso es algo nuevo, nunca hemos tenido ferias para que sean incluidos los comerciantes informales”, comenta Cubillos, afín al movimiento Revolución Ciudadana y promotor de la iniciativa Guayaquil Rebelde.
Entre lo invertido por la nueva administración de la ciudad también constan contrataciones para educación, –especialmente la capacitación de bachilleres en oficios como soldadura o mecánica automotriz–, área a la que se ha dedicado $ 1,3 millones, mientras que para eventos y festejos de la ciudad se asignaron en estos seis meses $ 1,2 millones. (I)
