Frente al estiaje y a los apagones de hora y media diaria que enfrenta el país por falta de generación eléctrica -resultado de un modelo estatista, inversiones en hidroeléctricas con problemas, y falta de gestión de las actuales autoridades- el Gobierno ha armado una serie de medidas a corto y mediano plazo para combatir los cortes de luz. Estas medidas podrían llegar a costarle una abultada factura al país de $ 600 millones o $ 700 millones, opinan varios expertos. Y este valor más los $ 309 millones que ha dedicado la Corporación Eléctrica del Ecuador (Celec) para mejorar el parque térmico, y que sí constaba en el plan de inversiones, suma un total de entre $ 900 y $ 1.000 millones.
El Gobierno ha anunciado varias medidas que van desde la compra de energía a Colombia y a Perú, la negociación con generadores privados, contratación de barcazas, hasta la importación de gas natural, para solventar la falta de generación de energía.
Sobre las medidas que ha anunciado el Gobierno, Alberto Acosta Burneo, editor de la publicación Análisis Semanal, considera que la compra de energía a Colombia y Perú de 500 MW y los 100 MW que se obtendrían de generadores privados o ahorro de privados servirá para proveer de energía de manera emergente e inmediata. Y considera que en cambio las otras medidas (barcazas y gas) tomarán un tiempo más extendido, pero que todas son necesarias de realizar, pues el estiaje puede alargarse y el siguiente año también tendremos una situación similar.
¿Pero cuánto costaría cada una de ellas?
Una de las alternativas más costosas es la compra de electricidad a Colombia. De acuerdo con Jorge Luis Hidalgo, experto en temas energéticos y gerente de Green Power (empresa que concursa por Campo Amistad), Colombia nos vende su energía más cara que es la térmica. A un precio estimado de entre 25 centavos y 45 centavos el kwh, y considerando que esto duraría tres meses, se llegaría a un total de $ 360 millones, indica.
Aún no está claro cómo se hará el pago, pues el presidente Guillermo Lasso, quien gestionó la entrega de mayor energía desde Colombia, también adelantó que se buscará hacer una suerte de canje de energía por energía o de energía por petróleo. Esto se definirá en las siguientes semanas a través de mesas técnicas.
Entre las medidas que demorarían un poco más está la contratación de nueva generación de 465 MW a través de barcazas o con soluciones en tierra, que serán contratadas por las empresas distribuidoras de energía. Marcelo Jaramillo, gerente de la Empresa Eléctrica Quito, que encabeza este proceso, ha hablado de una inversión en $ 160 millones. Esta contratación se hará por concurso público, un proceso que ya empezó.
Hidalgo también comenta que las empresas eléctricas tendrían problemas para afrontar estos gastos. Considera que luego de dichas inversiones quedarán “quebradas”. En este sentido, dice que parece inevitable que haya incremento de tarifas. Efectivamente el martes pasado, el viceministro de Electricidad (e), Juan José Espinosa, mencionó la necesidad de revisar el tarifario a fin de darle liquidez al sistema. Justamente en estos días se debe realizar un ajuste. Para Hidalgo, si se va a revisar el tarifario debería empezarse con el subsidio que recibe un grupo de grandes industriales, mineras y petroleras que pagan 5 centavos por kWh en las noches y fines de semana.
Entre tanto, ya se ha empezado a sondear el mercado de la importación de gas por parte de Petroecuador. En este recurso es importante el precio por millón de BTU, pero además se deben realizar una serie de adecuaciones de la infraestructura para que este pueda llegar efectivamente a la Termogás Machala. Hidalgo conoce de cerca el negocio del gas y señala que el millón de BTU está ahora en $ 18, que es más caro que el gas nacional ($ 3,6). Pero además para la importación se deberá construir o tener un regasificador. Calculando de manera prudente por los 55 millones de pies cúbicos que se requieren por tres o cuatro meses se requerirían unos $ 120 millones, de acuerdo a sus estimaciones.
Adicionalmente, el gerente de Celec EP, Gonzalo Uquillas, ha explicado que durante el 2023 se han invertido al menos $ 309 millones en adecuación del parque térmico. Esta cifra incluye la compra de motores que se adquirieron de Corea del Sur, pero que aún no empiezan su viaje hacia Ecuador. Solo los motores costarán $ 65,82 millones, y generarán unos 54 MW. El resto de esos recursos han servido para la recuperación, rehabilitación y reposición los motores. Compra de repuestos, maquinaria, servicios especializados y, adicionalmente, combustible.
Alberto Acosta Burneo comenta que aparte de lo que se debería gastar para viabilizar estas medidas, los apagones tienen un costo para el sector comercial e industrial. Con base a los datos que ha dado el propio Ministerio de Energía, indica que a la sociedad le cuesta $ 1,5 cada kilowatio de apagones y considerando que hay recorte de energía al menos por una hora y media cada día, el costo en un mes sería de $ 242 millones para el sector comercial e industrial. (I)
Fuente: El Universo