Que Daniel Noboa sea el nuevo presidente de los ecuatorianos debe entenderse en su real dimensión.
No solo se convierte en el candidato más joven en la historia del país, sino que recibe el voto del conglomerado de jóvenes ahora el grupo más importante según el último censo del país en el 2022.
Es indudable que Daniel Noboa encarna lo nuevo y diferente del quehacer político de los últimos años, su discurso sanador, sin confrontación y ligero sembró la esperanza que todos queremos, un futuro sin pugnas de grupos políticos antagónicos, un futuro más seguro, con inversión, con salud y con empleo.
El desafío para Daniel Noboa es enorme, el corto tiempo del periodo presidencial lo obliga afinar prioridades a cumplir con sus propuestas y no decepcionar a sus votantes.
El joven presidente tiene un nuevo chip, con el cual debe procesar lo que gira y se dice en su entorno, estoy segura que sus oídos sabrán escuchar, pero sus acciones sabrán ejecutar, no hay tiempo para excusas y no hay tiempo para perder.
El hecho de ser joven, estar conectado en redes sociales, tener equipo logístico y humano de excelencia le llevó a captar a todos los jóvenes y ciudadanos en general que lo catapultó como presidente.
Los dos últimos hechos relevantes que le conectó y afianzó con la población fueron la fiebre por el Daniel de Cartón que invadió y multiplicó su presencia en física y en redes en mucho sitio, así como el apoyo que representó la imagen de Chito vera a quien le une una amistad de años atrás, con el comercial de la conocida y adamada marca Quaker dos elementos finales que cerraron con broche de oro su campaña.
El ánimo conciliador que le ha caracterizado al nuevo presidente nos garantiza que sabrá tender los puentes necesarios para cumplir con sus prioridades en beneficio de todos los ecuatorianos.
Adelante Ecuador Adelante ……….. Suerte presidente
