La inflación se mantuvo estable en 12 meses a septiembre en Estados Unidos, con los precios al consumo siempre impulsados por vivienda y gasolina, aunque surgen señales de moderación que alimentan el optimismo.
Pese a que el aumento de precios a 12 meses se mantuvo en 3,7% según el índice de precios al consumo (IPC) publicado el jueves por el Departamento de Trabajo, en la medición mes a mes la inflación se moderó por primera vez desde mayo, con una variación de 0,4% frente a 0,6% de agosto.
El dato anualizado decepcionó a los analistas, que esperaban una caída a 3,6%, según el consenso de MarketWatch.
Si se excluyen los precios de alimentación y energía, los más volátiles, la inflación llamada subyacente sí cedió en septiembre en la medición a 12 meses, para ubicarse en 4,1%.
El presidente Joe Biden, en campaña por su reelección, dijo que la inflación bajó “60% con relación a su máximo” de 9,1% en junio de 2022, que fue un pico en 40 años, un resultado que atribuyó, en un comunicado de prensa, a su gestión de gobierno.
Mejoras progresivas
“Las tasas (de inflación) siguen elevadas pero muestran, globalmente, una mejora progresiva”, resumió Rubeela Farooqi, economista jefe de HFE.
Según la especialista, es un dato que puede abogar en favor de la estabilidad de tasas de interés durante la próxima reunión de la Reserva Federal (Fed, banco central), los días 31 de octubre y primero de noviembre.
La Fed tiene un objetivo de inflación a 12 meses de 2%, y ha venido subiendo sus tasas de interés de referencia en un intento de encarecer el crédito y bajar así el consumo y la inversión para enfriar la economía, de forma de bajar presiones al alza sobre los precios.
Actualmente sus tasas de referencia se ubican en un rango de 5,25-5,50%.
Los directivos de la Reserva Federal acordaron el mes pasado mantener tasas de interés altas “por algún tiempo” para contener la inflación, según extractos de su última reunión de política monetaria publicados el miércoles.
Para el organismo es ahora una cuestión de duración en el tiempo, y no tanto del nivel que alcancen los tipos de interés, que ya se ubican en cotas máximas en más de 20 años.
La mayoría de los directivos de la Fed estima que un alza adicional este año sería apropiada.
Dos presidentes de filiales regionales del banco central estimaron en cambio que las condiciones monetarias más estrictas provocadas por el alza de los rendimientos de los bonos del Tesoro estadounidense podrían tener un efecto similar.
Los problemas de los comercios
“No puedo trasladar la inflación (a precios) al mismo nivel” de los índices, explicaba recientemente Jennifer Haesley, directiva de Sweet Mama’s Mambo Sauce, una pequeña empresa creada en 2017.
El precio de una botella de salsa “es el mismo desde que estoy en actividad” pero eso “debería cambiar en 2024”, explicó a la AFP el 2 de octubre en un mercado de York (Filadelfia), antes de una visita al lugar del presidente de la Fed, Jerome Powell.
“Voy a tener que subir los precios porque las botellas aumentaron, las etiquetas valen más”, explicó la emprendedora. Pero también, dos de sus ingredientes esenciales, tomates y morrones, “aumentaron 50%”.
Su margen, que era de 65% por botella previamente, antes de impuestos, se achicó ahora a 45%, explicó.
Fuente: AFP
