Cada día, entre 600 y 700 extranjeros ingresan a Ecuador a través del aeropuerto Internacional Mariscal Sucre de Quito.
Este flujo constante de viajeros requiere un control migratorio riguroso para garantizar el cumplimiento de la normativa vigente y la seguridad del país.
La Subsecretaría de Migración, bajo la rectoría del Ministerio del Interior, es la entidad encargada de verificar la documentación y el estatus migratorio de quienes buscan ingresar al territorio ecuatoriano.
De acuerdo con la Ley Orgánica de Movilidad Humana y la Constitución de la República del Ecuador, los ciudadanos extranjeros deben cumplir ciertos requisitos para ser admitidos en el país.
Antonio Félix, representante de la Subsecretaría de Migración, explicó que entre los principales requerimientos están: poseer un documento de viaje válido y vigente con al menos seis meses de validez restante; justificar su condición migratoria mediante una entrevista con las autoridades migratorias y presentar una visa temporal de turismo en caso de pertenecer a una nacionalidad de riesgo.
“El control migratorio es una competencia del Ejecutivo y se realiza con estricto respeto a los derechos humanos. Sin embargo, en casos de riesgo o de incumplimiento de requisitos, se activan protocolos de verificación y posible inadmisibilidad”, afirmó Félix.
Si un extranjero no cumple con los requisitos de ingreso es sometido a una segunda revisión en coordinación con la Dirección General de Inteligencia del Ministerio del Interior y la Policía Nacional.
En caso de persistir las irregularidades, la persona es declarada inadmitida y se le asigna un espacio temporal en el aeropuerto hasta que pueda abordar un vuelo de retorno.
“Cuando un extranjero es inadmitido, la aerolínea que lo transportó está obligada a trasladarlo de vuelta a su último puerto de embarque. Si el vuelo demora más de 24 horas, se establecen medidas cautelares, como la presentación diaria ante las autoridades migratorias”, detalló Félix.
Durante 2024, la Subsecretaría de Migración ejecutó 3.053 inadmisiones a nivel nacional, incluyendo puertos, aeropuertos y pasos fronterizos.
Además, se iniciaron 498 procesos administrativos de deportación, de los cuales 43 fueron ejecutados. Otros 19 procesos se realizaron por considerarse que los involucrados representaban una amenaza para la seguridad pública del Estado.
En lo que va de 2025, se han registrado 214 inadmisiones en aeropuertos, puertos y fronteras. Asimismo, hay 49 procesos de deportación en curso, con 14 ya ejecutados y 8 considerados de riesgo para la seguridad nacional.
El 3 de febrero, tres ciudadanos colombianos fueron inadmitidos en el aeropuerto internacional Mariscal Sucre de Quito.
Según la Subsecretaría de Migración, estas personas no lograron justificar su condición migratoria de manera adecuada. Aunque no contaban con alertas migratorias previas, presentaron inconsistencias en su documentación y en las razones de su ingreso al país.
Los viajeros que han pasado por el proceso de control migratorio en Ecuador destacan la rapidez y organización de las entrevistas. Michael Padilla, un ciudadano guatemalteco, comentó que su experiencia fue “muy fácil y práctica”, destacando que las medidas de seguridad “nunca están de más”.
“El proceso ha sido bastante rápido y nada invasivo. Nosotros viajamos con menores de edad por temas deportivos y entendemos que se deben extremar las medidas de seguridad”, señaló Padilla.
Según la Ley Orgánica de Movilidad Humana, las principales razones por las que un extranjero puede ser inadmitido en Ecuador incluyen:
- Presentar documentación falsa o adulterada.
- Estar registrado con una disposición de no ingreso.
- No justificar su condición migratoria.
- Ser considerado una amenaza para la seguridad pública.
- Intentar evadir los filtros migratorios.
Por otro lado, las causales de deportación incluyen:
- Haber ingresado al país por un punto no autorizado.
- Proporcionar documentación fraudulenta.
- No haber iniciado el proceso de regularización en el plazo establecido.
- Haber reincidido en faltas migratorias.
La Subsecretaría de Migración también trabaja en coordinación con la Policía Nacional para la identificación de viajeros que puedan representar un riesgo para la seguridad del país.
En este contexto, el 1 de diciembre de 2024, un ciudadano estadounidense identificado como González E. fue inadmitido en el aeropuerto internacional Mariscal Sucre debido a una alerta migratoria activa en su contra.
“Los procesos extraordinarios se aplican cuando unidades especiales de la Policía tienen información relevante que marca una causal de deportación inmediata. Estos casos son tratados con prioridad y en estricto cumplimiento de las garantías legales”, señaló Félix.
El control migratorio en Ecuador enfrenta el reto de garantizar la seguridad nacional sin afectar la movilidad de quienes cumplen con la normativa vigente.
La Subsecretaría de Migración informó que trabajan constantemente en la optimización de procesos, reducción de tiempos de verificación y fortalecimiento de la seguridad en aeropuertos, puertos y pasos fronterizos.
Con más de 3.000 inadmisiones y cientos de deportaciones ejecutadas en los últimos meses, Ecuador se postula en búsqueda de una política migratoria ordenada y enmarcada en la legalidad.
Fuente: El Universo
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