Alberto Dahik, economista, exvicepresidente de la República y actual director del Centro de Estudios Económicos de la Universidad Espíritu Santo, durante una entrevista con LA HORA, explicó que tanto los ciudadanos como los políticos ecuatorianos siguen pateando hacia adelante la solución de los problemas estructurales. Por eso, este 2024 cerrará con ecuatorianos más pobres y endeudados.
En 2016 y 2017, luego del descenso del precio del petróleo durante 2014 y 2015, se atribuyó la fuerte crisis económica que vivió el país a esa baja en el crudo, pero en realidad la causa verdadera fue la injustificable expansión del gasto público que pasó de un 23% del Producto Interno Bruto (PIB) a un 43%.
Como lo he dicho en muchas ocasiones, ese nivel era más alto que la Venezuela de Chávez, el Brasil de Lula e incluso la Argentina de los Kirchners. Ecuador llegó a ser el país latinoamericano con el más alto nivel de gasto público como porcentaje del PIB.
Hoy, se trata de posicionar a la crisis energética como la causa de la muy dura situación que está pasando el país. Esto tampoco es así ya para el primer semestre de 2024 el Producto Interno Bruto cayó.
En el primero y en el segundo trimestre de 2024 respecto a periodos similares del 2023, el PIB cayó -1,3% y- 2,2%, antes de los apagones.
El PIB puede aumentar, por ejemplo, porque aumenta brutalmente el precio del petróleo, se vende más petróleo, y eso se refleja en el valor de la producción. El gobierno puede con eso, por ejemplo, acumular dólares en el Banco Central, pero eso no aumenta el consumo de los ciudadanos.
Cuando uno ve el primer y segundo trimestre de 2024, se registra una caída importante del consumo. Mi intuición es que puede ser todavía mayor y ese menor nivel de consumo de los hogares es el que va a determinar la tensión social.
Porque si uno lo hace per cápita, puede ser que este año el consumo de los hogares caiga hasta en un 4 o 5% por debajo del año anterior. Es decir, estamos conviviendo con una situación muy dura en la economía ecuatoriana.
P Si no son los apagones, ¿Cuáles son las razones de fondo por las que la economía ecuatoriana vive en crisis?
Porque los gravísimos problemas estructurales no se tocan, no se resuelve, se patean hacia adelante. No solamente porque el gobierno no actúa, sino porque lamentablemente la sociedad ecuatoriana, como lo he dicho en muchas ocasiones, tiene un chip muy raro.
Los ciudadanos piden que le bajen impuestos, pero al mismo tiempo que el Estado invierta más y que me den más subsidios. Esto es una verdad insensatez, una verdadera locura, pero así piensa la gente.
Entonces, los políticos no tienen incentivos para abordar los temas estructurales. La consecuencia es que un país que una situación compleja, tanto en lo económico como en lo político.
P ¿Cómo entender las últimas declaraciones del director del SRI sobre que no hay crisis económica y las ventas crecen en Ecuador?
El tema es que crecen las ventas que incluyen exportaciones, pero decrecen las ventas locales. Cuando uno analiza tiene que separar las ventas locales porque son esas ventas son las que reflejan el consumo de la gente.
Pero hay que ir un paso más allá y no ver solamente las ventas locales, sino el consumo de los hogares.
Si el consumo de los hogares decrece, las ventas totales pueden crecer, pero la gente está consumiendo menos porque las ventas totales reflejan el valor también de las exportaciones.
P ¿Es cierto, como dice el Gobierno de Noboa, que se han tomado medidas para salvar la dolarización? ¿Qué tan grave es la crisis fiscal y cuánto más de podrá deteriorar en los próximos años?
La situación fiscal de 2025 y 2026 será ciertamente mucho grave que la de 2024. Todos los gobiernos han dicho que las medidas que toman han salvado la dolarización. Se lo dijo en el gobierno de Moreno, en el gobierno de Guillermo Lasso y ahora en el Gobierno de Noboa porque claro, si usted no hace un acuerdo con el FMI, y no vienen divisas de afuera y la dolarización queda tremendamente comprometida.
Por lo tanto, es verdad que hay acciones que se realizan que impiden una crisis de la dolarización, pero la dolarización no se salva por conseguir un alivio financiero temporal. La dolarización se salva cuando uno resuelve los gravísimos problemas estructurales que tiene la economía. Eso no se ha resuelto.
Hoy por hoy, todo lo que se hace es tomar más deudas. Pero, por ejemplo, no se soluciona el problema de los subsidios, tampoco se concreta reforma al sistema de pensiones, ni se discute la irracional estructura de las tasas de interés.
Cuando se trata de las grandes reformas, lo que se dice es que eso no se puede hacer o no se puede hablar porque no es conveniente políticamente.
Con esa lógica, vamos a seguir sin hacer nada hasta que la economía explote.
P ¿Hasta cuándo puede soportar la economía ecuatoriana sin reformas estructurales ni cambios de fondo?
Los países no quiebran, pero los que sí quiebran son los ciudadanos y las empresas. Yo creo que no hay espacio para seguir pateando más las reformas estructurales. Es lamentable que ningún candidato diga lo que realmente necesita el país, bajo el argumento de que eso no da votos.
Estamos en una sociedad en la cual, tanto los electores como los elegidos, son corresponsables de lo que pasa. Si la sociedad no quiere aceptar su realidad, también es responsable de lo que está pasando.
P ¿Es una solución de fondo o solo un parche más las medidas tomadas como la llamada Ley de Alivio Financiero?
El alivio financiero se hizo casi exactamente igual en la pandemia. Si usted tiene una fuerte infección, con escalofríos y fiebre, si se toma un analgésico se va a sentir mejor, pero no ha solucionado la infección.
Después de un tiempo, la infección está peor porque usted solo se ha tomado los analgésicos y no ha curado aquello que le produce los síntomas.
Eso es lo que sucede con una ley, que hay que decir que era necesaria, pero solo es un analgésico para que los síntomas de la infección no le hagan la vida miserable.
Entonces, debo decir que es lógico buscar que haya un alivio para los deudores, no se puede criticar eso, pero no se está solucionando el problema.
P ¿Cómo el Ecuador puede dar el salto y comenzar a resolver sus problemas estructurales y generar más empleo?
No puede haber generación de empleo sin inversión, y no puede haber inversión cuando el Estado regala $10.000 millones al año en subsidios. De dónde va a sacar la plata para invertir si está regalando subsidios. Por lo tanto, para que el país crezca se requiere una gigantesca transformación que pasa por eliminación de subsidios; resolver a fondo el tema de la seguridad social; transformar una estructura de tasas de interés controladas a una tasas de interés que reflejen la realidad económica y la realidad financiera; promover una reducción del gasto corriente en aquellas áreas donde se lo puede hacer; apoyar irrestrictamente la minería legal que es aquella que puede ser controlada y puede ser multada y sancionada si destruye el medio ambiente; cambiar la legislación laboral para facilitar la creación de empleo; cambiar las normas para permitir la inversión privada en generación de electricidad y otras áreas, que se consideran de acuerdo a la Constitución como estratégicas y solamente facultativas del Estado (una de las barbaridades, entre las muchas que tiene, la Constitución de Montecristi).
Solo si implementamos todas esas reformas, ahí podremos iniciar un camino que es largo, y que tiene siquiera 30 años de recorrido, para poder sacar al país de la pobreza y transformarlo en un país donde el círculo virtuoso de la inversión, más producción y mayor ahorro permitan crecimiento, más empleo y más riqueza.
P ¿Qué deberían proponer los candidatos a la presidencia de la República para salvar a la economía ecuatoriana?
Debemos ir hacia un acuerdo nacional, que no sea una decisión de tal o cual candidato. Ecuador no tiene objetivos nacionales como sí lo han logrado países como Chile, Costa Rica, Uruguay, Perú y Colombia.
Ecuador no tiene políticas de Estado ni tiene acuerdos nacionales, que tienen incluyan a todos los sectores. Hay que hablar con todos, hay que sentarse con todos, para acordar metas mínimas que permitan resolver los graves problemas del país.
Mientras esa capacidad de diálogo y de entendimiento no exista, es muy difícil pensar que el Ecuador tenga una salida.
P ¿Cómo entender que el presidente Noboa declare un logro de su Gobierno que los bancos ganen menos?
Debemos tratar de los bancos tengan sana competencia y no exista tasas reguladas por el Estado. Entre mayor sea la rentabilidad, los bancos podrán capitalizarse más y crecer. El crecimiento de los bancos permite dar más crédito y más crédito permite más crecimiento económico.
Es lamentable, por ejemplo, que en una situación de crisis se les haya puesto a los bancos y a las cooperativas un impuesto especial. En una situación de crisis, lo que usted quiere es que haya rentabilidad.
El Estado lo que sí puede hacer es obligar a que la rentabilidad no se distribuya utilidades, sino que se transforme en capital, y al transformarse en capital, permita más provisiones, más reservas y más solidez. Hay que acordarse que cuando un banco presta $10, la mayoría de ese dinero es de los depositantes.
P ¿Hay espacio para una nueva reforma tributaria, con otro aumento de impuestos, en 2025?
El Ecuador necesita recursos, pero la mejor forma de recogerlos es eliminar subsidios. Yo creo que más impuestos, sin previamente eliminar subsidios, es un despropósito. Le están subiendo impuestos a la gente y a las empresas para que los contrabandistas se sigan llevando el diésel el gas subsidiado y esto es inmoral.
P ¿Es posible eliminar subsidios como el del diésel cuando siempre que se hacen intentos salen los opositores a inclusive incendiar el país?
En el gobierno del cual fui vicepresidente, eliminamos concretamente todo el subsidio a los combustibles y establecimos un método para calcular el precio de acuerdo con la valoración internacional.
El resultado fue que luego de eso los partidos políticos, por razones del populismo, echaron para atrás ese proceso y se volvió a los subsidios. Pero al final significa que si es posible tomar la decisión y eliminar los subsidios.
Para que esas decisiones correctas no se desmonten, lo que se necesita es precisamente un acuerdo nacional.
P ¿Para qué sirven realmente los acuerdos con el FMI? ¿Son solo para tener liquidez en el corto plazo? ¿Por qué luego de esos acuerdos el Ecuador sigue en crisis?
Con el FMI hemos llegado a acuerdos donde se incluyen la eliminación total del subsidio a los combustibles, y no se ha hecho.
Entonces, los acuerdos con el FMI no llevan a buen puerto al país, no porque sean malos, sino por el que el Ecuador no hace su tarea. (JS)
Diario La Hora