En los pasillos del Instituto Weizmann, uno de los centros científicos más prestigiosos del mundo, en la ciudad de Rehovot, Israel, transcurre gran parte de la vida de un científico cuyo trabajo ha comenzado a redefinir nuestra comprensión de la biología celular. Se trata de Moshe Biton quien, aunque de bajo perfil, está dejado una marca indeleble en la inmunología y la biología celular, con los estudios que, paso a paso, están develando los misterios del intestino humano.
A simple vista, este órgano podría parecer común, limitado a la digestión de los alimentos. Pero Biton dice que es un universo en sí mismo, un sistema complejo lleno de interacciones celulares que pueden ser la clave para comprender numerosas enfermedades.
Infobae