Al PSG le entraron contra el Angers todas las ocasiones que perdonó el miércoles contra el Atlético de Madrid. El conjunto parisino arrasó al recién ascendido en su feudo, 2-4, liderados por un fantástico Asensio, que dio dos asistencias, estuvo involucrado en tres goles y se reivindicó como titular para Luis Enrique. Donnarumma, que en Europa tiene una versión y en Francia otra, también relució. Fue un apeadero, un paseo militar para un equipo que va sobrado en la liga francesa, con seis puntos de ventaja respecto al segundo clasificado, el Mónaco, y que, sin embargo, en la Champions está rozando la lona.
El partido estaba sentenciado a la media hora de juego. Necesitó 17 minutos para adelantarse el PSG, pero los goles se le cayeron de los bolsillos. Con un extraordinario Marco Asensio, moviéndose principalmente por la izquierda, el líder de la Ligue 1 abrió la lata gracias a Kang-in Lee. El surcoreano, con la derecha, puso el 0-1 y se produjo un torrente de goles. El pase se lo dieron finalmente a Zaïre-Emery, pero la realidad es que el exjugador del Real Madrid fue clave en prácticamente toda la jugada.
El español, que había sido criticado por su partido contra el Atlético, no desaprovechó su oportunidad. En otro desmarque suyo en la izquierda, atacando la espalda de la débil defensa del Angers, asistió otra vez a Kang-in Lee, tocado por una varita. Y, como si la Ligue 1 transformara a todos los jugadores del PSG, Donnarumma fraguó cualquier conato de reacción del Angers, ya que salvó, con una parada milagrosa, un mano a mano contra Niané. En Francia, lo para todo. En Europa, sin embargo, le sigue costando.
Inmediatamente después de la providencial intervención del italiano, Asensio, desatado, volvió a ser protagonista con una asistencia sutil a Barcola, que, como si también la liga francesa le transformara en un gran definidor, batió a Fofana con una facilidad pasmosa. El extremo, por si fuera poco, culminó un primer tiempo perfecto del PSG con un testarazo inapelable y ajustado al palo.
El segundo tiempo fue un mero trámite para el PSG, que aminoró el ritmo y le dejó al Angers incluso hilar varias llegadas de peligro. Los Angevins consiguieron en el tramo final maquillar el resultado, gracias a una volea espectacular de Lepaul y un remate de cabeza de Biumla en el último minuto. Su reacción llegó demasiado tarde y el Paris Saint-Germain consiguió mitigar la derrota que sufrió esta semana contra el Atlético en Champions.
Fuente: Diario AS
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