Donald Trump será el nuevo presidente de los Estados Unidos, luego de arrasar en las elecciones para este cargo, en las que compitió con la candidata demócrata y actual vicepresidente de esta nación, Kamala Harris.
Su regreso a la Casa Blanca vendrá con una serie de cambios en los diferentes frentes que tiene el país norteamericano, más específicamente en su política migratoria, relaciones internacionales y guerra contra el narcotráfico, algo que pondría a Colombia en su agenda venidera como primer mandatario de la principal potencia del mundo.
“Esto tendría un impacto directo en el tipo de cambio en Colombia, elevando el TRM y encareciendo importaciones, lo cual puede afectar el costo de vida y los costos de insumos para la industria colombiana”, indicó Álvaro Humberto Ojeda, vicepresidente ejecutivo de Values AAA, Banca de Inversión (BVC).
Sin embargo, en temas comerciales, Colombia poco o nada mueve a los intereses que sí son prioridad para Trump, en caso de que se desee una renegociación del tratado de libre comercio, según el director asociado de Control Risks, Theodore Kahn.
“Tenemos que ver qué agresivo termina siendo Trump en cuanto al tema de aranceles porque eso creo va a determinar en gran parte las implicaciones para las perspectivas de crecimiento a nivel global y también para economías claves”, señaló.
Sin embargo, desde el Gobierno colombiano se confía en que la relación estrecha con Estados Unidos, basada en la colaboración contra el narcotráfico, se mantenga bajo la segunda administración de Trump.
Aunque pueden surgir diferencias, “es importante encontrar un lugar común” en el tema de la política de drogas, considera el ministro de Relaciones Exteriores, Luis Gilberto Murillo.
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