Más del 90 % de ocupación hotelera en Cuenca marca un feriado exitoso por su independencia

Cuenca vivió uno de sus mejores feriados pospandemia, con una ocupación hotelera que superó el 90 % en la ciudad durante el fin de semana de celebraciones por sus 204 años de independencia.

Según Juan Pablo Vanegas, presidente de la Asociación de Turismo del Azuay, este feriado ha sido “importante para el sector turístico” y destacó que, en términos de ingresos económicos y flujo de turistas, representa uno de los periodos más destacados para la industria hotelera desde la crisis sanitaria del COVID-19.

La ciudad, conocida como la Atenas del Ecuador, recibió visitantes de distintas partes del país, especialmente de la provincia del Guayas, quienes buscan en Cuenca un destino seguro y atractivo.

Los días de mayor movimiento en alojamientos fueron el viernes 1 y sábado 2 de noviembre, donde hoteles, hostales y otros sitios de hospedaje reportaron una ocupación que superó el 90 %, un dato que refleja el éxito de este feriado en comparación con años anteriores.

La conmemoración a la ciudad incluyó una variada agenda de eventos que atrajo tanto a turistas nacionales como internacionales. Conciertos de gran afluencia, como los protagonizados por Piso 21 y Aldo Ranks, lograron vender todas las entradas, consolidándose como atractivos principales para los visitantes.

Además, ferias, desfiles y muestras artísticas engalanaron el centro histórico de Cuenca, que se vistió de gala en honor a esta fecha.

El alcalde Cristian Zamora y el presidente Daniel Noboa estuvieron presentes en la sesión solemne de independencia, este domingo, 3 de noviembre, acompañados de autoridades y ciudadanos que celebraron el legado histórico de Cuenca.

Durante el feriado, la ciudad también fue reconocida por su gastronomía tradicional, destacando el mote y una variedad de preparaciones locales con cerdo, res y pollo, que deleitaron el paladar de los asistentes.

A este escenario festivo se sumó el anuncio de que no se realizarían cortes de luz durante los días de asueto, una medida que permitió que tanto residentes como visitantes disfrutaran de las actividades sin interrupciones.

El feriado, que coincidió con el Día de los Difuntos y fue extendido a cinco días por decreto presidencial, consolidó a Cuenca como un destino turístico sólido, resaltando su importancia cultural y su atractivo para el turismo nacional. (I)

Fuente: El Universo

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