Victor Koronelli dijo que las autoridades de ambos países están trabajando conjuntamente para recabar información sobre el tema.
Los regímenes de Cuba y Rusia están intercambiando información sobre jóvenes cubanos que fueron reclutados aparentemente de manera engañosa para participar en la guerra contra Ucrania, según manifestó este miércoles Victor Koronelli, embajador del país euroasiático en La Habana.
Este fue el primer comentario público de la representación rusa en la isla sobre un grupo de hombres que habrían sido llevados para participar en el conflicto bélico mediante una supuesta red desde la nación caribeña.
“Los órganos competentes están en contacto y están trabajando tanto de parte de Rusia como de parte cubana. Por el momento no puedo dar más comentarios”, dijo a un grupo de periodistas extranjeros Koronelli, quien fue abordado luego de participar en la ceremonia de agradecimiento por una donación a la isla de aceite de girasol.
“Yo no sé cuántos cubanos están allí. No tengo más información”, agregó el diplomático.
A comienzos de septiembre las autoridades cubanas informaron que habían arrestado a 17 personas en relación con una red que presuntamente reclutaba a jóvenes para que combatieran a favor de Rusia en Ucrania. Algunos lo hacían para obtener ganancias o la ciudadanía rusa.
La madre de un muchacho indicó que a su hijo lo habían atraído con la falsa promesa de obtener trabajo en el sector de la construcción y que se fue con el objetivo de ayudar económicamente a su familia en medio de la dura crisis económica que atraviesa la isla.
La cancillería cubana aseguró que trabaja en la “neutralización y desarticulación” de esa red y que la nación caribeña “no forma parte del conflicto bélico en Ucrania”. La legislación local establece que el mercenarismo y el reclutamiento para tal fin es un delito grave.
Hasta el momento no se informó cuántos cubanos estarían involucrados en el conflicto. Sin embargo, de acuerdo al análisis realizado por The Havana Consulting Group y Cuba Siglo 21, el régimen cubano desarrolló un potencial logístico que pudo haber permitido el traslado a Rusia de más de 14 mil militares en los meses de julio y agosto de este año.
Además de ser socio comercial y aliado político de Moscú, la dictadura de Miguel Díaz-Canel respaldó al gobierno de Vladimir Putin desde el inicio de la invasión a Ucrania.
En mayo un periódico de la región rusa de Riazán reportó la presencia de varios ciudadanos cubanos en las oficinas de alistamiento e indicó que buscaban obtener la ciudadanía rusa.
La ley rusa permite a los extranjeros alistarse en su ejército previa firma de un contrato con el Ministerio de Defensa. Desde septiembre de 2022 éstos también pueden solicitar la ciudadanía del país euroasiático tras servir un año en esa fuerza militar.
Un grupo ucraniano de hackers filtró fotografías de los pasaportes de casi 200 presuntos mercenarios cubanos a principios de este mes, según el medio digital The Intercept.
El grupo dijo que había obtenido las fotografías de los pasaportes tras hackear la cuenta de correo electrónico personal de un oficial militar ruso involucrado en el reclutamiento.
Lo que comenzó como una serie de desconcertantes mensajes en las redes sociales y desesperadas peticiones de ayuda se ha convertido en una compleja red de acusaciones y contradicciones.
Vegas Díaz, de 19 años, contó su historia luego de verse en una trinchera en Ucrania, flanqueado por soldados rusos. Según la oferta que le llegó por WhatsApp, se trataba de un “trabajo de construcción”. Pero en lugar de eso, él y un amigo fueron equipados con armas y enviados a la fuerza al frente de una guerra a la que no tenían intención de unirse.
“Lo que está pasando en Ucrania es feo: ver a la gente con la cabeza abierta delante de ti, ver cómo matan a la gente, sentir las bombas cayendo a tu lado”, se lamentaba Vegas Díaz en un video junto a Andorf Velázquez que se viralizó a fines de agosto desde un hospital ruso, donde afirmaba estar recuperándose de una enfermedad antes de ser destinado al frente. “Por favor, por favor, ayúdennos a salir de aquí”.
Esta desesperada petición de ayuda se difundió rápidamente y surgieron historias similares a medida que los cubanos acudían a las redes sociales y reclamaban información sobre sus seres queridos que se habían aventurado a Moscú con intenciones similares a las de los muchachos.
La ONG Prisoners Defenders viene advirtiendo que parte de los cubanos reclutados son enviados a Bielorrusia -aliado de Rusia- para recibir entrenamiento militar, para luego ser enviados al campo de batalla. “El ejército cubano, como es bien sabido, es uno de los pocos en el mundo que no necesita recibir formación alguna de las tropas de Alexandr Lukashenko, salvo si la formación tiene como fin entrar en combate usando el armamento moderno suministrado por Rusia en la actual guerra de Ucrania y enmascarar una vía de entrada para la participación en la guerra de efectivos cubanos altamente entrenados”.
Las acusaciones de tráfico pueden ser un intento del régimen cubano, aliado de Rusia desde hace mucho tiempo, de mantener su neutralidad en la guerra de Ucrania, según varios expertos en Cuba y ex funcionarios estadounidenses.
Fuente: Infobae