La variación de precios de la canasta familiar en Estados Unidos ha sido clave en la campaña electoral, no sólo porque ha acaparado gran parte del debate, sino porque es considerada la principal preocupación de los votantes. En agosto de 2024, la inflación fue del 2,5%, un poco mejor de lo que esperaban los analistas.
Horas después de un agitado debate presidencial en Estados Unidos, un dato macroeconómico llegó para desmentir una de las acusaciones de Donald Trump contra su rival Kamala Harris: que la inflación del país era la peor que se ha visto en la historia del país.
El Departamento de Trabajo informó que, en agosto de este año, la inflación anual fue del 2,5%, lo que marcó varios hitos: es el mejor dato interanual desde febrero de 2021 y considerablemente más bajo que el 2,9% que registraba en julio y que lo que esperaban los analistas.
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Contrario a lo expuesto por el candidato republicano, si bien la variación de precios sigue estando por encima del 2% anual que se fijó como meta el Banco Central, sí está lejos del 9,1% que registró en verano de 2022 por los estragos de la pandemia y la guerra en Ucrania.
Una inflación cada vez más cerca de la meta es un insumo para que la Reserva Federal comience a bajar las tasas de interés en su reunión de la próxima semana, aunque los analistas todavía ven con recelo que la inflación subyacente, que excluye rubros volátiles como los alimentos o la energía, siga siendo alta, del 3,2%.
Un debate con acusaciones mutuas -y algunas falsas- sobre la economía
Este dato de inflación llega para poner aún más ingredientes a una ya condimentada campaña presidencial que, en lo que concierne a la economía, dista mucho entre partidos.
Como respuesta a los comentarios de Donald Trump, Kamala Harris aseguró que su agresiva política de aranceles propuesta “perjudicaría a la clase media” por la vía de una mayor inflación, a lo que Trump replicó con acusaciones de que el alza de los precios solo ha empeorado.
La exfiscal acusó a su contrincante de haber llevado al país a su peor situación de desempleo en la historia, aunque omitió que esa tasa récord desde la Gran Depresión, del 14,7% en abril de 2020, fue el primer efecto inmediato de la pandemia y que, en los meses previos, el mercado laboral gozaba de su mejor salud en décadas.
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Más allá de las acusaciones sesgadas, ambos candidatos ofrecieron pocas pistas sobre el futuro en cuestiones clave como los aranceles, los impuestos y la regulación.
Previo al cara a cara entre aspirantes a la Casa Blanca, también se conoció que la tasa de pobreza se redujo levemente en 2023: 11,1% frente al 11,5% de un año antes, lo que, en términos absolutos significa que 36,8 millones de personas están en esa situación en la mayor economía del mundo.
