Cada día, más personas en Ecuador se suman a la fiebre de la criptomoneda Worldcoin. Multitudes se agolpan en las oficinas de esta marca, en Quito y Guayaquil, atraídas por el incentivo de un bono cercano a los 20 dólares que la empresa ofrece en ‘cripto’. El primer requisito: dejar escanear su iris.
Ayer, Kevin Rodríguez hacía una extensa fila en las afueras de las instalaciones de Worldcoin en Guayaquil, ubicada en Samanes 6. Se enteró por TikTok de que una empresa estaba ‘regalando’ ese dinero. De inmediato decidió ir, aunque sospechaba que podía ser una estafa. “Ahorita, esos 20 dólares me sirven porque estoy ‘chiro’, sin trabajo. Con esto podré imprimir currículums”, dijo, luego de pegar su ojo a una curiosa esfera metálica. Lo que Kevin hizo fue una “prueba de humanidad”; es decir, validar que es un ser humano y no ‘bots’, a partir del iris de su ojo, lo que le permite a aquella compañía enlazar cada cuenta con un usuario único.
Martín Mazza, gerente regional para Latinoamérica de Tools for Humanity, la compañía responsable de Worldcoin le contó a EXPRESO que este procedimiento se aplica sin necesidad de revelar la identidad. Esta empresa, asegura, “no almacena información personal o biométrica de los usuarios”. Agregó que solo fotografían el iris durante el proceso de verificación y luego la foto es eliminada del orbe ‘al toque’.
Pero la práctica, que la empresa norteamericana ya ha llevado a cabo en otros países, empieza a generar curiosidad y alertas entre los expertos. Y es que brindar datos biométricos no es poca cosa. Son especialmente delicados, por ser inalterables. Uno puede cambiar de nombre y hasta de pareja, pero el código del iris de cada persona es único. “Esa información podría ser utilizada por cualquier sistema a futuro, lo cual es peligroso”, advirtió Rayner Durango, docente e investigador de Ingeniería Telemática en la Espol.
Según Worldcoin, las imágenes del iris que capturan son “empaquetadas, cifradas y ‘firmadas’ por un orbe para garantizar la autenticidad y la seguridad”. Pero Durango cuestionó esta afirmación: “No hay una garantía de asegurar esta información, que es muy confidencial”.
Enrique Peláez, PhD y docente de la carrera de Ingeniería en Computación de la Espol, concordó con Durango: “No hay mecanismos de verificación. ¿Cómo se les hace una auditoría para analizar el hardware? Es un ente privado y está fuera de las regulaciones porque es algo nuevo”.
Ante estas interrogantes, Mazza afirmó: “Worldcoin cumple con todas las exigencias de la ley aplicables a la actividad del proyecto, aquí y en todos los países donde opera”, asegurando que el proyecto está amparado bajo la Ley Orgánica de Protección de Datos Personales del país.
Ecuador es uno de los 39 países donde hay Orbes. Mazza explica que, según una encuesta en el país, el 95% de los encuestados está de acuerdo o algo de acuerdo en que las empresas tecnológicas deberían desarrollar nuevas tecnologías para verificar quién es humano en línea y no un ‘bot’, un programa informático que utiliza la inteligencia artificial para imitar el comportamiento humano, un mecanismo que se puede prestar a estafas. Esto fomentó la inclusión de Ecuador en el proyecto, dijo.
Pero la empresa no abrió sus puertas apenas esta semana. Worldcoin ya tiene poco más de un año desde que empezó a obsequiar criptomonedas en distintos países de todo el mundo bajo esta controversial temática de escanear el iris de los voluntarios. Tomando en cuenta esto, Peláez intuye que otro fin podría ser incentivar el valor de las criptomonedas. Al controlar la oferta inicial y distribuirla de manera gratuita, particularmente en países en desarrollo, Worldcoin puede aumentar la demanda. “Ese es el as bajo la manga: aprovechar la escasez”, explica.
Autoridades de Kenia decidieron suspender temporalmente a Worldcoin en su territorio debido a preocupaciones sobre la privacidad de datos. Al poco tiempo después finiquitaron las disputas legales en el país africano y continuaron el proyecto.
Algo similar ocurrió en España. Allí, la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) prohibió temporalmente en marzo de este año a Tools for Humanity. Sin embargo, a pocos días de que expiren los tres meses de suspensión, el presidente de dicha compañía, Alex Blania, comunicó la decisión de no continuar con la iniciativa en ese país, al menos por lo que reste del año.
Fuentye: Diario Expreso