Carlos Rabascall, excandidato vicepresidencial por la coalición correísta UNES, este 27 de julio se afilió a la Izquierda Democrática y en la misma ceremonia aceptó la precandidatura a la Presidencia de la República por las listas 12, aunque dijo que se someterá a las elecciones primarias para reafirmar su postulación para los comicios de 2025.
Rabascall llegó caminando unas cuadras hacia la sede de la ID, ubicada en el centro norte de la ciudad de Quito, y estuvo acompañado por la presidenta nacional de la organización, Analía Ledesma, Jorge Sánchez, Yeseña Guamaní, Marlon Cadena, entre otros, aunque también acudió al sitio el exprefecto por Alianza PAIS Gustavo Baroja, quien hasta el 2008 perteneció también al partido de bandera naranja.
Un grupo de militantes del partido que no está de acuerdo con la afiliación y postulación de Rabascall como precandidato presidencial llegó también hasta el edificio de la ID con carteles, megáfonos y en medio de gritos se enfrentó con los seguidores del nuevo huésped naranja.
En paralelo, en las redes sociales circuló un comunicado suscrito por seis presidentes de las directivas provinciales y tres vicepresidentes nacionales miembros del Consejo Ejecutivo Nacional, en el que exponen que rechazan “de manera categórica, enfática y unánime” la pretendida precandidatura a la Presidencia de la República de Carlos Rabascall.
Como razones señalan que la ID, desde sus inicios, siempre ha combatido a las mafias políticas que han secuestrado al país en los últimos años, y por ello, “la militancia no concibe aceptar siquiera la afiliación a nuestra organización política por parte de una persona que comulgó y representó a grupos que han sido señalados y sentenciados por las autoridades competentes por actos de corrupción.
Que es de conocimiento público que el precandidato ha mantenido siempre una línea cercana y afín al gobierno del expresidente Rafael Correa, quien fue procesado y sentenciado por actos de corrupción, originando una debacle en el aspecto de seguridad, el ámbito económico y social.
También militantes como el exasambleísta, Dalton Bacigalupo, anunció su separación del partido, pues en sus redes sociales escribió que está disconforme con las reiteradas actitudes conflictivas a su interior, que son conocidas por la opinión pública.
Afiliación
Carlos Rabascall, quien pronto cumplirá 64 años de edad, llegó vestido de camiseta naranja acompañado de su esposa y varios de sus simpatizantes personales que se encargaron de avivar su presencia en la Izquierda Democrática, y él se incorporó a vocear: “La ID unida jamás será vencida”.
Jorge Sánchez, quien fue designado presidente nacional de partido en mayo pasado y luego de un proceso de impugnación se desconoció su cargo, dio inicio a la ceremonia de afiliación de Rabascall y dedicó unos minutos a hablar sobre la situación económica del país y a plantear la necesidad de que la ID presente una propuesta electoral propia con hombres y mujeres capaces de ofrecer soluciones a problemas de pobreza, seguridad, salud y educación.
Luego intervino Analía Ledesma, actual presidenta encargada del partido, quien afirmó que hoy la ID renace en todas provincias y dio la bienvenida a Carlos Rabascall. Señaló que nadie diga que aquí hay divisionismo, “sí habrá unos cuatro o cinco que no estén contentos, pero esa es la democracia”.
Manifestó que en la ID puede haber compañeros que por más que los tachen tienen un pensamiento socialdemócrata de base, y la Izquierda Democrática nunca ha sido ni será una secta; que con Carlos Rabascall transformarán el país.
Tras el acto de afiliación frente a la militancia de la ID, Carlos Rabascall inició su discurso señalando que en adelante la Izquierda Democrática será su casa y que ahí se queda, cuyo partido -dijo- tiene una marca y una marca buena, porque tiene una reputación buena que marcó un hito histórico a través de personas que nunca fueron cuestionadas, como Rodrigo Borja Cevallos y Raúl Baca Carbo.
Dijo que llega a la ID para decirle “a esa clase política que está envenenada y adicta al odio, que desde la Izquierda Democrática le vamos a poner fin al odio”.
Rabascall, en su discurso, señaló que está consciente de que su afiliación a la ID no es al 100 % aceptada por la militancia, pero que esas diferencias enriquecerán al partido.
Recalcó que se afilia a la Izquierda Democrática porque “acá hay democracia, porque aquí se puede hacer política, y quiero agradecer a la directiva de Pichincha por ofrecerme la precandidatura, y quiero decirle desde ya que no solo acepto la precandidatura a la Presidencia de la República, sino que también me acojo a las primarias para que sea en democracia donde se decida al candidato a la Presidencia”.
Insistió en que ya se afilió a la ID, y que no se trata de una candidatura, porque en caso de que no gane las primarias igual seguirá haciendo política en el partido de las listas 12. “En adelante soy un compañero más, que he venido para sumar, para contribuir a la modernización y crecimiento del partido y para recuperar la socialdemocracia que se constituye en esa tercera vía”.
Entre los asistentes a la ceremonia de afiliación de Carlos Rabascall a la Izquierda Democrática también acudió al auditorio del partido el exprefecto de Pichincha por el correísmo Gustavo Baroja, quien hasta el 2008 perteneció a la ID, luego participó dos veces en las elecciones seccionales por el extinto movimiento Alianza PAIS.
Baroja ocupó una silla distante a la principal de la ID y evitó a la prensa mientras duró la ceremonia, y adelantó su paso para abandonar la casa del partido de la lista 12 antes de que salga el precandidato presidencial, Carlos Rabascall.
Rabascall, ataviado de una camiseta y bufanda de la ID, ante la prensa aclaró que nunca se afilió al correísmo, que participó como candidato a la Vicepresidencia de la República en el 2022 como parte de una coalición Unión por la Esperanza (UNES), que en ese momento era un acuerdo para recuperar la economía, el trabajo y trabajar por la equidad territorial; pero que su pensamiento siempre se ha identificado más con la socialdemocracia.
Antes de concluir su visita a la sede del partido naranja dijo que aún no ha tenido la oportunidad de reunirse con el expresidente Rodrigo Borja, pues tiene entendido que su salud es un poco delicada. (I)
