Vejez: ¿Cuándo Empieza Realmente? Nuevos Estudios Desafían los 60

La noción tradicional de que la vejez comienza a una edad fija se está desmoronando ante las últimas investigaciones científicas y las transformaciones sociales. Los hallazgos más recientes sugieren que la percepción de cuándo una persona entra en la tercera edad ha experimentado un cambio drástico: hoy, quienes tienen 60 años no se ven a sí mismos como «ancianos», una imagen que era común hace apenas unas décadas.

Esta evolución en la percepción desafía las creencias establecidas y pone en tela de juicio la existencia de un límite biológico definido para el inicio de la vejez, según la opinión de expertos en el campo del envejecimiento.

El Dr. Eric Verdin, líder del Instituto Buck para la Investigación sobre el Envejecimiento, es enfático al señalar que no hay un punto de quiebre biológico universal que determine el paso de la adultez media a la vejez.

“Existe una variación fenomenal entre las personas”, comenta Verdin. Esta diversidad ha llevado a la comunidad científica a dar prioridad a la edad biológica —la condición real de nuestras células y tejidos— por encima de la edad cronológica, la cual solo refleja la cantidad de años vividos.

La edad biológica, basada en la condición de células y tejidos, gana relevancia frente a la edad cronológica

Un estudio reciente, dirigido por Markus Wettstein de la Universidad Humboldt en Berlín, corrobora esta perspectiva: la edad a la que se percibe la vejez ha aumentado, y los adultos que se encuentran en etapas intermedias y avanzadas de la vida se sienten más jóvenes que sus pares de hace veinte años.

Factores Históricos y Culturales en la Definición de la Vejez

Históricamente, la vejez se definía por la capacidad funcional y la contribución a la familia y comunidad. Sin embargo, la institucionalización de la jubilación en Occidente, a finales del siglo XIX y principios del XX, desvió el enfoque hacia la edad cronológica.

La distinción entre edad biológica y cronológica es crucial para comprender por qué el envejecimiento no puede ser un concepto uniforme. Diversos factores, como la genética, el estilo de vida, los niveles de estrés y la presencia de enfermedades crónicas, impactan directamente en el ritmo de envejecimiento de nuestro organismo.

Los eventos que marcan la vida pueden acelerar o desacelerar la edad biológica, lo que explica por qué algunas personas conservan capacidades físicas y cognitivas propias de edades más tempranas. Verdin destaca que “el envejecimiento está influenciado por la cultura”, y subraya cómo, mientras en Occidente se idealiza la juventud, en sociedades orientales como China y Corea, la vejez se asocia con sabiduría y profundo respeto.

El Impacto Perjudicial del Edadismo

El edadismo, es decir, la discriminación por motivos de edad, tiene repercusiones que van más allá de la simple percepción social. La Organización Mundial de la Salud (OMS) señala que esta discriminación puede manifestarse de maneras sutiles, como la preferencia por candidatos jóvenes en el ámbito laboral, o de forma explícita, a través de la falta de respeto hacia las personas mayores.

La discriminación por edad se manifiesta en la preferencia por candidatos jóvenes en el mercado de trabajo

Estas actitudes pueden conducir al aislamiento social, un deterioro de la salud e, incluso, en los casos más graves, a una muerte prematura. La investigadora Becca Levy, de la Universidad de Yale, ha documentado cómo las creencias negativas sobre la edad afectan negativamente la salud física, mental y cognitiva.

“Las creencias negativas sobre la edad pueden conducir a una peor salud física, mental y cognitiva”, advierte Levy.

Avances Científicos y Desafíos Futuros en la Longevidad

Paralelamente, la investigación científica en materia de longevidad y envejecimiento saludable ha experimentado un crecimiento sin precedentes. Inversiones significativas, tanto públicas como privadas, están impulsando el desarrollo de terapias y biomarcadores destinados a extender la vida y mejorar su calidad. Entre los avances más notables se encuentran la reprogramación celular, la eliminación de células senescentes y la exploración de intervenciones dietéticas como el ayuno intermitente.

No obstante, los expertos coinciden en que aún no se dispone de una herramienta definitiva para medir con precisión la edad biológica. El fenómeno de los superancianos —individuos que mantienen una salud y vitalidad excepcionales a edades avanzadas— ha capturado el interés de la comunidad científica, que busca replicar sus beneficios en la población general.

El fenómeno de los superancianos despierta el interés de la comunidad científica por su salud y vitalidad excepcionales

Según proyecciones, para el año 2050, aproximadamente una de cada tres personas en el mundo tendrá 60 años o más. Este importante cambio demográfico presenta desafíos considerables en los ámbitos social, económico y sanitario, demandando una profunda revisión de las políticas públicas y de las actitudes sociales hacia la tercera edad.

En este escenario, la investigación sobre la longevidad y la salud en la vejez no solo busca añadir años a la vida, sino también mejorar significativamente la calidad de esos años y transformar la percepción social del envejecimiento. El objetivo primordial de los científicos es que estos avances permitan a las personas disfrutar de una vida más larga y plena, y que la sociedad aprecie y valore cada etapa vital, libre de prejuicios.

Fuente: Infobae

COMPARTIR ESTA NOTICIA

Facebook
Twitter

FACEBOOK

TWITTER