El reconocido actor Ethan Hawke ha compartido detalles íntimos sobre su experiencia trabajando junto a Robin Williams en la icónica película de 1989, La sociedad de los poetas muertos. Hawke, quien en aquel entonces tenía tan solo 18 años, reveló que desde el set de rodaje pudo percibir la profunda complejidad emocional que rodeaba al carismático actor.
En una reciente entrevista, Hawke enfatizó que la partida de Robin Williams en 2014 no cambió su visión de la película, pues ya era consciente de los desafíos personales que Williams enfrentaba. «Estaba al tanto de la complejidad de su vida emocional«, afirmó el actor, quien apenas iniciaba su carrera cinematográfica. Para él, Williams, ya una figura conocida pero no en la cúspide de su fama, representaba un ejemplo de la dualidad entre el éxito público y las batallas internas.

Hawke describió cómo fue testigo directo del lado menos visible de la estrella. «En mi familia se ha vivido mucha depresión, y me resultó evidente que todo ese poder y ese carisma tenían un costo», confesó. Detalló que, a pesar de su energía desbordante frente a las cámaras, Williams era «una persona profundamente sensible«, con una gran atención hacia el entorno que lo rodeaba.
Un momento revelador que Hawke compartió fue cuando, tras presenciar a Williams improvisando y deleitando a todos con su humor, lo encontró más tarde «aislado, a oscuras, en un rincón«. Esta escena le hizo comprender la gran carga que Williams llevaba, un desgaste considerable que afectaba su energía.

La película, un drama inspirador sobre un profesor de literatura que revoluciona la vida de sus alumnos, contó con un elenco joven que incluía a Ethan Hawke, Josh Charles y Robert Sean Leonard. La conexión entre Hawke y Williams trascendió la pantalla, convirtiéndose el veterano actor en un mentor para el joven Hawke.
Hawke también recordó en una entrevista con Vanity Fair la forma poco convencional en que Williams abordaba la actuación: «Robin Williams no seguía el guion«, señaló. «Si tenía una idea, la ejecutaba sin pedir permiso». Para Hawke, esta libertad creativa fue una revelación que amplió su perspectiva sobre el arte de la actuación.
Al reflexionar sobre la película hoy en día, Ethan Hawke admite que lo que más evoca es el espíritu de Robin Williams: «Pienso en el espíritu del hombre que conocí aquellos días, su increíble fuerza y el esfuerzo que suponía lidiar con su propia mente por los demás. Lo admiro notablemente«.

Reflexiones de Ethan Hawke sobre su vida personal
Más allá de su carrera cinematográfica, Ethan Hawke ha atravesado experiencias personales significativas, especialmente tras su divorcio de la actriz Uma Thurman. Dos décadas después de su separación, el actor compartió reflexiones sobre la complejidad de las rupturas, particularmente cuando se desarrollan bajo el escrutinio público.
«La opinión pública actúa como un combustible, pero lo que realmente complica un divorcio es lo mismo que afecta a todos: los asuntos familiares, cómo ayudar a los hijos a transitar la situación«, afirmó Hawke, destacando que los desafíos inherentes a la crianza y el bienestar de los hijos son el principal foco en estos procesos.
El actor confesó sentir admiración por aquellas parejas que logran separarse de manera amistosa, pero se mostró cauto al hablar de su propia experiencia: «les prometí a mis hijos que no hablaría del tema en público«, explicó, mostrando su compromiso con la privacidad familiar.
Ethan Hawke y Uma Thurman unieron sus vidas en 1998, y su matrimonio concluyó con la solicitud de divorcio por parte de Thurman en 2004. Fruto de su relación nacieron dos hijos: Maya y Levon. Posteriormente, Hawke encontró la felicidad en una nueva relación, casándose en 2008 con Ryan Shawhughes, con quien ha tenido dos hijas: Clementine e Indiana.

Hawke también reveló en una entrevista con The Times que, tras su divorcio, inicialmente no contemplaba volver a casarse ni tener más hijos: «Cuando me separé estaba decidido a no tener más hijos y quería permanecer soltero el resto de mi vida. Pero después hice una gran amiga y me gustó besarla», relató con una sonrisa, mostrando cómo la vida le deparaba nuevas sorpresas.
Fuente: Infobae