A los 28 días de protestas y paralizaciones que surgieron por la eliminación del subsidio al diésel, una primera iniciativa de diálogo con el movimiento indígena ‘murió’ sin que haya visto la luz, pues el gobierno de Daniel Noboa desconoce a los “interlocutores legítimos”.
La Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie) llamó a sus organizaciones de base a un paro nacional en protesta a la decisión del presidente de la República, Daniel Noboa de suprimir el subsidio al diésel que elevó su precio a $ 2.80, desde el 12 de septiembre.
Las medidas de hecho se observaron en varios puntos del país, pero se centralizó en Imbabura, que de seguir este martes, cumpliría 29 días de paro.
Se esperaba que este lunes haya un primer encuentro, pero la administración de Noboa anunció que “no hay condiciones”, porque se cambiaron los actores y se vulneraron los compromisos adquiridos, como abrir las carreteras que conectan con Imbabura.
El ministro del Interior, John Reimberg, advirtió este lunes que el Gobierno cumplió, pero el movimiento indígena no y, por lo tanto “se cierra el diálogo y a partir de ahora, cualquier cosa que pase será responsabilidad de ellos”.
“Como vieron, hubo un diálogo. Pidieron un diálogo, estuvimos en el diálogo como Gobierno, llegamos a acuerdos. (…) Ellos se encargaron de cerrar las puertas al diálogo, ellos no llegaron a entender que lo que estábamos haciendo era bastante importante para los dos lados”, dijo el ministro.
El ministro de Inclusión Económica y Social, Harold Burbano, aseguró que hubo reuniones con aquellos líderes de agrupaciones que tienen “legitimidad”, pero cambiaron los actores del diálogo.
El domingo —contó— “sale un comunicado en donde nos cambian los actores… y no vamos a llegar al diálogo con otras condiciones. Lo que nos ha decepcionado es que no se abren las vías. Tener secuestrada a Imbabura no está en el marco de un derecho a la protesta, sino en otros intereses políticos”, expresó Burbano este 20 de octubre.
Un primer acercamiento se dio el 15 de octubre con el ministro Reimberg y los líderes de la Federación de los Pueblos Kichwa de la Sierra Norte del Ecuador (Chijallta FICI) que agrupa a los pueblos Karanki, Kayambi, Natabuela y Otavalo.
Y, de la Federación Indígena Campesina de Imbabura (Ficapi) y de la Unión de Organizaciones Campesinas Indígenas de Cotacachi (Unorcac), estas dos últimas que son parte de la Confederación Nacional de Organizaciones Campesinas, Indígenas y Negras (Fenocin).
Estras tres agrupaciones resolvieron el domingo último a las 10:00, que en este cónclave participen los presidentes de la Conaie, Marlon Vargas; de la Ecuarunari, Alberto Ainaguano; y de la Fenocin, Gary Espinoza, por ser las que “convocaron al paro nacional”.
Por su lado, el Gobierno increpó en un comunicado que se alteraron los términos y se cambiaron “los actores” y los compromisos dados de buena fe.
🔴 A la ciudadanía: pic.twitter.com/lrSRrDd2jn
— Ministerio de Gobierno Ecuador (@MinGobiernoEc) October 20, 2025
Mientras tanto, los afectados invocan a las dos partes a conversar.
El alcalde de Antonio Ante (Imbabura), César Escobar, cuenta que cada día de paralización representa pérdidas por los $ 400.000 que en estos 28 días representan $ 15′000.000.
Él ha estado presente en dos encuentros y cree que sería prudente que los representantes de las comunidades indígenas lleven sus dudas a las asambleas locales y las trasladen al Gobierno.
“A veces, cuando hay muchas personas es difícil llegar a acuerdos y consensos. Creo que debe haber más comunicación porque el desgaste, producto de tantos días de paro, hace que no haya esta uniformidad de criterios… Pero invoco a que se solucione todo lo más pronto”.
Una alternativa, es que desde el Estado haya dialogo con las “comunidades y aborden temas más profundos como el del subsidio o los incentivos. Que haya una conversación entre las cabezas y que se diga cuáles son los requerimientos mínimos para recuperar el diálogo y de parte y parte se cumpla, porque de lo contrario, el escenario no es favorable para nuestros territorios”, manifestó Escobar.
La presidenta del Pueblo Kichwa Kayambi, Dennise de la Cruz, cree que el régimen está actuando con autoritarismo y pese a que la gente está pidiendo conversar, “en los hechos solo quiere dialogar con ciertos grupos sin la parte orgánica que es la Conaie, nosotros respetamos las estructuras y ese diálogo debe hacerlo con Marlon Vargas”.
“Nuestros compañeros han visto la necesidad de buscar este diálogo y no precisamente por la conveniencia de un solo pueblo, sino para transmitir las decisiones colectivas. Hemos pedido la reparación de los compañeros fallecidos y heridos y pidiendo la libertad de quienes siguen detenidos”, dijo.
Recriminó que en la “realidad no ha habido ese diálogo con resultados”, por lo que ellos seguirán en la “resistencia”.
“No nos doblegaremos. En distintos puntos se va fortaleciendo la resistencia, pero el único que no da señales de querer dialogar o tener intención de dialogar es el gobierno”, afirmó De la Cruz.
Floresmilo Simbaña, reconocido dirigente quichua de la Conaie y que ha asesorado a la Ecuarunari, consideró que desde el Palacio de Gobierno se está “buscando conflicto, polarización y ponerse en plano de víctima sobre todo frente a la consulta popular”, que se realizará el 16 de noviembre.
A su criterio, se desconoce a los interlocutores —como la dirigencia nacional de la Conaie— porque el “Gobierno dice que no quiere dialogar con los presidentes nacionales, sino que va a dialogar con las bases. Y cuando las bases le dicen lo mismo que están diciendo las dirigencias, ahí dice: ‘No, ya no quiero dialogar con esos dirigentes violentos, que va a dialogar directo con la gente”.
Finalmente, la Conaie respondió a la posición gubernamental y en un comunicado titulado: “El gobierno de Daniel Noboa cierra toda posibilidad de diálogo”, coincide en que no hay condiciones para discutir mientras siga la represión.
⭕ [COMUNICADO]
El Gobierno de Daniel Noboa cierra toda posibilidad de diálogo.La #CONAIE reafirma su voluntad política de diálogo verdadero y su disposición a un cese a la confrontación, pero no aceptará conversaciones vacías ni condicionadas por la represión.
Exigimos el… pic.twitter.com/ofAFbA6Af8
— CONAIE (@CONAIE_Ecuador) October 20, 2025
“Dialogar no es imponer ni amedrentar: es escuchar, reconocer errores y construir soluciones con respeto y voluntad política. La salida a la crisis requiere de un diálogo nacional, público y transparente, con agenda de demandas claras y con representación de toda la estructura organizativa.
El movimiento expresó su disposición y voluntad política a conversar, pero no aceptará conversaciones vacías ni condicionadas. “Exigimos el fin de la violencia estatal y el reconocimiento del movimiento indígena como un interlocutor legítimo”.
Fuente: El Universo
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