Netanyahu defendió la operación en Doha como una “decisión completamente independiente” de Israel. “Asumimos la responsabilidad total”, subrayó el primer ministro, quien calificó de “inmensa hipocresía” las críticas por el ataque, a pesar de que el propio Trump estuvo entre quienes cuestionaron la acción israelí.
“Estamos enfocados en lo que sucede después”, respondió Rubio cuando se le preguntó sobre el ataque en la capital qatarí, donde Israel intentó eliminar a líderes de Hamss que discutían la última propuesta estadounidense de alto el fuego.
El primer ministro israelí citó la resolución de la ONU aprobada tras el 11 de septiembre que establece que ningún país puede albergar terroristas. “No tienes tal soberanía cuando has dado una base a los terroristas”, argumentó Netanyahu, quien pareció reconocer que Israel no logró eliminar a los líderes de Hamas, pero aseguró que el ataque envió un mensaje: “puedes esconderte, puedes correr, pero te atraparemos”.
Durante las declaraciones conjuntas, Rubio elogió la “determinación común” entre Estados Unidos e Israel, así como la decisión de Trump de atacar el programa nuclear iraní. El secretario de Estado subrayó que Irán representa una amenaza no solo para Israel y Estados Unidos, sino también para los aliados del Golfo y Europa, calificando un Irán nuclear como un “riesgo inaceptable” para el mundo.

Netanyahu agradeció a Trump por su ayuda y reafirmó el compromiso israelí de traer de vuelta a todos los rehenes y derrotar a Hamas en Gaza. El primer ministro describió la presencia de Rubio como una señal clara de que Estados Unidos respalda a Israel contra el antisemitismo y los “gobiernos débiles” que demonizan al país.
“Continuaremos actuando juntos para confrontar enemigos comunes y proteger nuestra civilización común”, declaró Netanyahu, quien elogió el liderazgo “consistente, audaz” de Trump y sus acciones para fortalecer la relación bilateral.
Rubio condenó la “barbarie sin precedentes” de Hamas y reiteró que algunos fundamentos permanecen sin resolver independientemente de lo ocurrido en Qatar: los rehenes siguen cautivos y Hamas aún existe. “Todos estos temas deben ser abordados”, enfatizó el funcionario estadounidense.
Según fuentes estadounidenses citadas por The Washington Post, Rubio viajará este martes a Qatar, donde funcionarios de todo el mundo árabe y musulmán están formulando una respuesta conjunta al ataque israelí. El embajador estadounidense en Turquía y enviado especial para Siria, Thomas Barrack, también se encuentra en Qatar.
La reunión entre Rubio y Netanyahu duró aproximadamente una hora y media en formato bilateral antes de expandirse con asesores de ambas partes. Anteriormente, Rubio había indicado que consultaría a Netanyahu sobre los planes militares israelíes para apoderarse de Ciudad de Gaza, el mayor centro urbano del territorio devastado, así como sobre las conversaciones del gobierno israelí sobre la anexión de partes de Cisjordania ocupada con la esperanza de impedir un Estado palestino.
El encuentro se enmarca en un momento de tensión diplomática, con una cumbre en la ONU programada para debatir el reconocimiento de Palestina como Estado, iniciativa que Netanyahu rechaza abiertamente. Rubio había declarado previamente que Trump quiere que la guerra de Gaza “termine” definitivamente, lo que significaría la liberación de los rehenes y asegurar que Hamás “ya no sea una amenaza”.
Netanyahu también se refirió a los edificios derribados en Gaza, asegurando que son bastiones de Hamas, y pidió al mundo que tenga “claras sus prioridades y hechos” sobre la situación en el enclave palestino.