Un nuevo acto de violencia sacudió a la Isla Puná, parroquia rural de Guayaquil, la noche del jueves 31 de julio. Cerca de las 21:30, dos embarcaciones resultaron destruidas tras un ataque armado con un artefacto explosivo en el sector Barrio Lindo.
Según versiones preliminares, un grupo de sujetos armados llegó en una lancha, disparó contra una gabarra estacionada en la zona y luego lanzó una bomba molotov, provocando un incendio que se propagó hasta una segunda embarcación cercana.
Las llamas consumieron ambas estructuras. Afortunadamente, no se registraron víctimas mortales, aunque las embarcaciones quedaron totalmente destruidas.
El ECU911 coordinó la respuesta inmediata con la Policía Nacional, Fuerzas Armadas y el Cuerpo de Bomberos de Guayaquil, quienes acudieron al sitio para controlar la emergencia y asegurar la zona.
Este ataque ocurrió pocas horas después de una visita oficial del alcalde de Guayaquil, Aquiles Alvarez, quien participó en la inauguración de obras y encabezó una sesión del Concejo Cantonal en la cabecera parroquial de Puná.
Las autoridades locales han expresado su preocupación por el repunte de la violencia en el golfo de Guayaquil, donde los ataques a embarcaciones, especialmente gabarras y lanchas utilizadas para transporte o pesca, se han vuelto frecuentes pese a los controles de la Armada del Ecuador.
Está previsto que personal militar y policial realice este viernes operativos en el sector para recopilar evidencias y reforzar la seguridad, mientras se investigan los móviles y responsables del atentado.
KG