El Gobierno ecuatoriano comenzó un proceso de deportación de personas privadas de libertad (PPL) de nacionalidad colombiana, con un primer grupo de 700 internos trasladados por el puente internacional de Rumichaca. El operativo, que prevé alcanzar los 1.000 deportados, se realiza en coordinación con diversas instituciones del Estado y bajo estrictos protocolos de seguridad.
Esta acción se ampara en un acuerdo ministerial firmado el 2 de julio de 2025 y en la normativa vigente sobre movilidad humana y procesos judiciales. Como parte de la ejecución, se llevaron a cabo aproximadamente mil audiencias individualizadas a reclusos colombianos, cuya resolución fue tramitada ante jueces competentes en todo el país. Una vez emitidas las boletas de excarcelación, las personas fueron entregadas a las autoridades migratorias para su repatriación.
En la frontera con Colombia se confirmó que aquellos reos que no tengan cuentas pendientes con la justicia de su país serán puestos en libertad. El operativo ha contado con la participación de autoridades de ambos países, incluyendo la visita del canciller colombiano al paso binacional de Rumichaca.