Un nuevo rostro llega a la comandancia de la zona 8 con la meta de reducir los índices delincuenciales y recuperar la confianza de la ciudadanía.
En este año, la zona 8, comprendida por Guayaquil, Durán y Samborondón, encabeza entre las zonas violentas del país, que ya que ha registrado un aumento de casos de asesinatos en un 61%.
Según cifras de la Policía Nacional, desde enero del 2025 con corte el 13 de julio se registraron 1.874 muertes violentas, mientras que a la misma fecha del 2024 se contabilizaban 1.165 casos.
Más del 70% de homicidios intencionales se concentran en cinco distritos: Nueva Prosperina, Durán, Pascuales, Portete y Sur.
“Viene con buena espalda”, le han repetido en varias ocasiones a Francisco Zumárraga, el nuevo comandante de la zona 8 desde el pasado 11 de julio. Antes estuvo Víctor Ordóñez en el puesto.
Según las estadísticas, desde el 1 al 13 de julio se ha registrado un decremento del 2% de la violencia, mientras que en junio también se reportó una baja del 7,5%.
Este es el escenario en el que Zumárraga quien con 33 años de experiencia en la Policía Nacional, asume la jefatura de Guayaquil, Durán y Samborondón en uno de sus momentos más complejos.
¿Qué experiencia trae a este nuevo cargo?
En toda mi trayectoria he trabajado con la ciudad de Guayaquil. De subteniente un año y medio, de teniente un año y de capitán un año. En el grado de coronel fui comandante del distrito Esteros en los años 2020, 2021 y 2022 cuando iniciaron los primeros brotes de violencia exponencial. En 2022 ese distrito terminó como el menos violento de la zona costanera con el trabajo que se desarrolló. Tengo la experiencia de 33 años de servicio prestando mi contigente en diferentes unidades como jefe de la Dirección de Antinarcóticos de la Policía Nacional y jefe del Grupo de Operaciones Especiales (GOE) en Guayaquil y a nivel nacional.
¿Cómo recibe la zona 8 al terminar el primer semestre del 2025 y cuáles son los desafíos?
En este momento estoy haciendo un diagnóstico del área operativa y administrativa para ver como se han venido desarrollando las operaciones en la zona 8. Vengo a reforzar lo que se está haciendo bien con la finalidad de obtener resultados mucho más efectivos. Voy a separar las áreas de concentración de violencia y con las unidades tácticas especializadas disminuir o neutralizar los niveles de violencia. También vamos a darle un tratamiento a las áreas crimífugas, en donde hay delitos que no vienen acompañados de violencia.
¿Cuál es el delito que se ha controlado y cuál es el que está en repunte?
Desde mi llegada acá ya hemos podido obtener buenos resultados en casos de extorsión. También justamente en un operativo en el distrito Modelo en coordinación con la Armada Nacional y en delito flagrante ingresamos a un patio de vehículos y decomisamos una gran cantidad de armas y municiones.
¿Cuáles serán sus metas en este nuevo cargo?
Las metas son la reducción de los niveles de violencia y delincuencia, que ya los tenemos. Este 14 de julio estamos en verde respecto a las muertes violentas, es decir hay un decremento del 2% en relación al comparativo del año anterior. Mi proyección también es generar un mayor acercamiento con la ciudadanía, autoridades locales y la empresa privada para cumplir con la famosa trilogía: autoridades locales, pueblo y Policía. Lo apliqué en Esteros y Chimborazo y no me fue mal.
¿Cuáles son las estrategias que espera implementar para acercarse a la ciudadanía?
Por ejemplo, cuando estuve en antinarcóticos organizabamos carreras con la ciudadanía “Yo vivo sin drogas”. Cuando estabamos en Riobamba el tema de las visitas permanentes de los planteles educativos. Se trata de que la gente conozca la realidad del Policía. La idea es que ustedes nos conozcan y que la diferencia entre ustedes y nosotros sea únicamente la ropa que vestimos y el compromiso con el que actuamos. Si nosotros logramos eso en la ciudadanía, ellos van a convertirse en nuestros primeros informantes.
¿Hay zonas que identifican como “rojas” o con mayor índice de violencia? ¿Qué tipo de intervención tendrán?
Tenemos una georeferenciación del delito, esto nos determina los lugares específicos en donde debemos reforzar. Adicional a esto debemos temporalizar el delito para conocer en que horario debemos fortalecer los trabajos en esos territorios. Esto para sacar del anonimato a todos aquellos delincuentes y ponerlos a órdenes de la autoridad competente.
¿Cuáles son las nuevas disposiciones que se van a tomar para combatir la violencia?
Debemos reforzar a las instituciones necesarias en estos tiempos difíciles. Una de esas instituciones es la Policía Nacional que dicho sea de paso, es una de las pocas que se autodepura. No vamos a dar el brazo a torcer frente a la delincuencia y también vamos a controlar que no existan malos elementos en nuestras filas. Es decir, permanentemente nosotros estamos vigilantes de que todos los servidores públicos cumplan los estándares mínimos para que puedan cumplir con su misión institucional, Adicional a eso, nosotros permanentemente estamos coordinando para que nos tomen las pruebas de confianza.
¿Qué mensaje le da a quienes sienten miedo incluso de salir a trabajar o llevar a sus hijos a la escuela?
Que confíen en nuestro trabajo. Quiero hacer un pedido a la ciudadanía para que efectivamente denuncien los hechos delictivos. Tenemos el 1800-Delito y el 131 Plan de Recompensas por donde pueden darnos información que puede ser tratada con absoluta confidencialidad para que podamos poner a estos infractores de la ley tras las rejas. (I)
Fuente: El Universo