Las autoridades agropecuarias recordaron que en Ecuador continúa vigente la prohibición de establecer nuevas siembras de musáceas —como banano y plátano— excepto aquellas que sean de tipo orgánico. Esta restricción está contemplada en la Ley del Banano y otras Musáceas Afines, vigente desde mayo de 2022.
Ante la posibilidad de nuevas plantaciones no autorizadas, el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) y Agrocalidad anunciaron el fortalecimiento de los controles a nivel nacional. La vigilancia se centrará en empresas que se dedican a importar, producir o comercializar material propagativo de estas especies.
Según la normativa, solo se permitirá la venta de este material si se cuenta con un permiso de siembra orgánica o de renovación, otorgado por las subsecretarías del MAG encargadas de las cadenas agrícolas estratégicas. Además, las compañías proveedoras no podrán distribuir productos a fincas que no hayan implementado medidas de bioseguridad.
Estas medidas forman parte de una estrategia de protección fitosanitaria frente al riesgo de ingreso de enfermedades como el Fusarium Raza 4 Tropical (Foc R4T), una plaga de alto impacto que aún no está presente en el país. También buscan frenar la propagación de otras amenazas ya existentes, como la bacteria Ralstonia solanacearum raza 2, causante del moko en las musáceas.
El pronunciamiento oficial ocurre tras el pedido de la Asociación de Exportadores de Plátano (Asoexpla), que planteó levantar la restricción para nuevas siembras de plátano, argumentando un alza en la demanda interna y un crecimiento sostenido en las exportaciones de esta fruta, tanto fresca como procesada.
Desde el gremio se insiste en que el plátano tiene un papel clave en el consumo nacional y la industria agroalimentaria, por lo que consideran necesario revisar las limitaciones actuales para asegurar la oferta del producto en el mercado local e internacional.