Los minoristas alemanes han detectado un enorme agujero de mercancía faltante por valor de 4.950 millones de euros cuando completen sus inventarios en 2024. Así se desprende de una nueva publicación del EHI Retail Institute del país, basada en una encuesta que realiza cada año.
Y aunque la pérdida global es un 3% superior a la del año anterior y supone un nuevo récord, los casi 5.000 millones de euros no se deben enteramente a la delincuencia. El informe calcula que aproximadamente 4.200 millones de euros de las pérdidas están relacionados con robos, y el resto puede achacarse a errores propios de las empresas, como el etiquetado incorrecto de los precios y errores de registro y valoración.
La encuesta recogió respuestas de 98 empresas, que gestionan más de 17.000 tiendas en Alemania. El informe sugiere que el hurto en comercios, incluida la delincuencia organizada, costó al sector unos 2.950 millones de euros el año pasado, lo que supone un aumento respecto a los 2.820 millones de euros de 2023.
Los propios empleados de las empresas también fueron responsables de pérdidas por valor de 890 millones de euros, y una pérdida de 370 millones de euros se atribuyó al hurto por parte de proveedores y empresas de servicios.
Según el informe de EHI, el hurto en comercios, es decir, el hurto cometido por los clientes, ha ido en aumento desde la pandemia de COVID-19, a pesar de que los informes policiales muestran un descenso del 5% en los casos denunciados en 2024.
«Un 98% de todos los hurtos pasan desapercibidos en Alemania, lo que significa que para contabilizar las pérdidas es necesario comprobar los inventarios en busca de artículos que faltan», señala el informe.
El crimen organizado controla cada vez más el hurto en tiendas
Las bandas de ladrones profesionales se han convertido en una importante amenaza para el comercio minorista. El estudio estima que, en comparación con el año pasado, los hurtos en comercios vinculados a la actividad delictiva organizada aumentaron un 5%.
En 2024, la actividad organizada representará alrededor de un tercio de todos los hurtos a clientes, es decir, casi 1.000 millones de euros. «Muchos minoristas tienen la certeza de que el hurto organizado se está profesionalizando y seguirá aumentando«, señala el informe.
Y añadía: «Los grupos más grandes entran en las tiendas y empaquetan los productos sin piedad. La seguridad y el personal no suelen tener ninguna oportunidad. El desarrollo incontrolable de la delincuencia en banda, su conexión con las grandes plataformas de venta en línea y la falta de medidas contra ella son problemas».
La pobreza también podría alimentar los hurtos
«Otro reto sigue siendo el hurto «ordinario» por parte de los clientes, que se atribuye en parte al aumento del coste de la vida y al incremento del desempleo», señala el informe.
Alemania, la mayor economía de la UE, ha estado luchando contra unos precios de la energía inflados y una menor productividad, en parte relacionados con la guerra de Ucrania y la pandemia del COVID-19. El sector manufacturero del país se enfrenta ahora a grandes incertidumbres en el comercio mundial, unidas a los elevados precios de la energía y a problemas en la cadena de suministro.
La maltrecha economía se ha contraído cada dos trimestres desde finales de 2022. El coste de la vivienda aumentó hasta el punto de que el 12% de la población gastó en ella más del 40% de sus ingresos el año pasado, según la oficina de estadística del país. La media de la UE es del 8,2%.
Una quinta parte de la población está en riesgo de pobreza o exclusión social y, aunque la inflación ha disminuido hasta situarse en torno al 2%, el desempleo está en su nivel más alto desde finales de 2020, con un 6,2%, según la Agencia Federal de Empleo. La agencia también señala en su último informe que el número de desempleados se acerca a la barrera de los 3 millones por primera vez en una década.
¿Dónde se producen más hurtos?
En las tiendas de alimentación faltaron productos robados por valor de casi 2.000 millones de euros, y los supermercados más pequeños fueron los más atacados. Las droguerías y ferreterías también sufrieron pérdidas significativamente mayores en algunos casos.
Mientras tanto, los registros oficiales de la policía, que no cubren todos los casos, muestran un descenso del 5% en los casos de hurto en tiendas para 2024, según los datos de las Estadísticas Policiales sobre Delincuencia (Polizeiliche Kriminalstatistik).
Esto sigue a dos aumentos dramáticos en 2022 y 2023, cuando los casos denunciados mostraron un salto de dos dígitos cada año, aumentando un 34,3% y un 23,6% respectivamente. Sin embargo, la encuesta de EHI Retail Institute señala que se estima que el 98% de los casos de hurto en comercios pasan desapercibidos.
En 2024, los daños ocasionados a los minoristas, por valor de 4.200 millones de euros, se traducirán también en pérdidas para el presupuesto federal.
«El perjuicio económico derivado del hurto por la pérdida de impuestos sobre las ventas asciende aproximadamente a 570 millones de euros al año», señala el informe, partiendo de la base de que tres cuartas partes de los artículos robados están sujetos a un tipo de IVA del 19% y la cuarta parte restante al 7%.
Aumento de los presupuestos de seguridad
Las empresas minoristas gastan alrededor del 0,33% de su facturación en medidas de seguridad, como formación del personal, vigilancia con cámaras, uso selectivo de detectives en las tiendas y expositores antirrobo.
El coste total de todas las inversiones relacionadas ascendió a unos 3.100 millones de euros, con lo que el coste total de los hurtos y su prevención ascendió a 7.300 millones de euros el año pasado. Esto supone alrededor del 1,5% del precio de venta de la compra media, lo que significa que los clientes también tuvieron que asumir los costes, concluye el estudio.