La Comisión de Biodiversidad y Recursos Naturales recibió a Amy García, abogada de la Fundación Mingas por el Mar, y al oceanógrafo Willington Rentería, en el marco del tratamiento del proyecto de ley que busca preservar las olas rompientes en el perfil costero ecuatoriano y los ecosistemas que albergan.
“Garantizar la implementación de procesos adecuados y técnicos previos a la construcción de infraestructuras que puedan alterar los fondos marinos y preservar los ecosistemas que albergan vida marina son los objetivos principales de esta norma”, señaló García.
Asimismo, manifestó que la norma no tiene efecto retroactivo sobre los permisos de construcción otorgados previo cumplimiento de normas legales y requisitos de no afectación a las rompientes y sus zonas aledañas.
La jurista sugirió a la comisión incluir a los ministerios del Ambiente, Deporte y Turismo como entes encargados de velar por la implementación efectiva de la ley, así como la inclusión del Ministerio de Obras Públicas como autoridad encargada del control de las obras que se ejecuten en las zonas protegidas.
Por su parte, Rentería hizo observaciones técnicas sobre la importancia de proteger el perfil costero, ya que las rompientes no solo son un fenómeno natural, sino un muro de contención frente al embate climático y la intervención humana que amenaza las costas.
Por último, aseveró que este proyecto ayudará a fomentar el respeto por la dinámica natural del oleaje para prevenir la erosión que, de no contenerse, provocará un cambio irreversible en la línea de costa.
CV