Las manifestaciones registradas este miércoles en Kenia dejaron un saldo de ocho personas fallecidas y alrededor de 400 heridas, según reportes de organizaciones de derechos humanos. Las protestas se desarrollaron en 23 condados del país para conmemorar el primer aniversario del estallido social que, en 2024, obligó al gobierno a frenar una polémica reforma tributaria.
Durante la jornada, miles de ciudadanos salieron a las calles de Nairobi y otras ciudades, desafiando un amplio despliegue policial que incluyó el uso de gases lacrimógenos y el bloqueo de edificios gubernamentales con alambradas. Entre los manifestantes se encontraban familiares de víctimas de las movilizaciones del año pasado.
En 2024, las protestas masivas contra el aumento de impuestos impulsado por el presidente William Ruto se saldaron con 60 muertos y alcanzaron su punto álgido el 25 de junio, cuando manifestantes irrumpieron en el Parlamento y forzaron la retirada del proyecto fiscal.
En esta nueva jornada de movilización, una coalición de organizaciones defensoras de derechos humanos informó que al menos 83 personas con heridas graves fueron trasladadas a centros médicos especializados, mientras continúa el recuento de afectados por la represión.