El nombre de Justin Bieber no deja de estar en boca de todos, esta vez, por un video en el que el cantante canadiense confronta fuertemente a varios paparazzi afuera del Soho House, en Malibu, California.
Lo que parecía una salida tranquila terminó en un estallido emocional en el que exigió respeto por su espacio y su rol como padre y esposo. Pero este no es un episodio aislado, es el reflejo de semanas y situaciones complejas en la vida del artista.
El enfrentamiento captado la madrugada del 12 de junio cuando se acercaba a su carro junto a la playa, no es más que la gota que rebosó el vaso.
El cantante reaccionó visiblemente molesto, alzando la voz y reclamando respeto. Dijeron presente los medios TMZ y Page Six, que captaron más de 11 minutos de una discusión encendida que ya circula viralmente en redes sociales.
¿Qué dijo Justin en el video?
El artista se molestó al ver que lo esperaban afuera del lugar “No estoy para que me jodan hoy, hermano”, dijo mientras intentaba evitar las cámaras. Señaló además que las preguntas constantes y la provocación lo empujaron a reaccionar así, pidiendo empatía.
Al notar que los paparazzi continuaban grabándolo, Bieber decidió “No arrinconarse”. Se puso frente a ellos y repitió “Me quedaré aquí, no me voy a arrinconar, no esta noche. No me dejaré acorralar, esta noche no”
Luego acusó a los fotógrafos de sacar sus palabras “fuera de contexto” y advirtió que él no estaba “para que lo jodan”, enfatizando que ahora tiene una familia y exige ser tratado como “un ser humano de verdad”.
Durante el altercado, Bieber se presentó como un hombre firme y decía con convicción:
“Soy un hombre de verdad con una familia de verdad. Amo a mi esposa, amo a mi familia… y me provocas, y es triste.”
Adicionalmente, explicó que al estar «frente a mi carro en la playa», esos encuentros lo agotan emocionalmente y le provocan un gran desgaste.
¿Problemas mentales o límites personales?
Muchos medios y seguidores han interpretado estos hechos como señales preocupantes sobre su salud mental. Sin embargo, otros defienden su actitud como un intento legítimo por poner límites.
Desde joven, Justin ha vivido bajo el ojo público, y aunque ha hablado abiertamente de su ansiedad y depresión en el pasado, hoy parece decidido a marcar una nueva etapa en su vida.