Una operación conjunta entre la Policía Nacional del Ecuador y su par de España logró desmantelar una estructura criminal transnacional que enviaba cocaína desde Ecuador hacia Europa, oculta en cargamentos de exportación aérea, específicamente en exportaciones de pitahaya.
El operativo, denominado Gran Fénix 23, se desarrolló de forma simultánea en Quito y Guayaquil. Las investigaciones iniciaron en 2024, y contaron con el respaldo de cooperación internacional bilateral, según informó el Ministerio del Interior.
La Policía señaló que la red criminal tenía nexos con la organización delictiva Chone Killers y operaba con el apoyo de funcionarios públicos que facilitaban la salida de cargamento contaminado con sustancias sujetas a fiscalización. Parte del esquema de tráfico incluía también a ciudadanos de nacionalidad albanesa, responsables de la logística y distribución de la droga en territorio español.
El ministro del Interior, John Reimberg, detalló que la sustancia era camuflada en envíos de pitahaya y transportada en contenedores aéreos con carga lícita. En total, fueron aprehendidas 13 personas en Ecuador, cuatro de ellas con antecedentes penales, y se detuvo a otros cuatro ciudadanos extranjeros en España.
Entre los detenidos en territorio nacional constan tres servidores policiales. Como parte del operativo, se incautaron 165 kilogramos de cocaína, 14 teléfonos celulares y dos computadoras, que están bajo análisis por parte de la Unidad de Investigación Antinarcóticos.
La Policía destacó que este golpe representa un avance importante en la lucha contra el narcotráfico y la infiltración de estructuras criminales en el comercio exterior.
KG
