El hombre de 53 años -cuya identidad no ha sido revelada- detenido tras atropellar a una multitud de fanáticos del Liverpool durante la celebración por el título de la Premier League, permanece bajo custodia policial y está siendo investigado por presunto intento de asesinato y delitos de conducción peligrosa y bajo los efectos de las drogas.
Las autoridades informaron que la cantidad de víctimas confirmadas ascendió a 65, de las cuales 50 fueron trasladadas a hospitales y 11 permanecen ingresadas en condiciones «estables».
La Policía realiza una «investigación a fondo» para determinar las causas del incidente, aunque por ahora descartan que se trate de un acto terrorista y no hay otros sospechosos involucrados.