En una noche llena de emociones, Lionel Messi volvió a brillar con su clase intacta y rescató un empate para el Inter Miami con un golazo de tiro libre que le dio el impulso al equipo que terminó reaccionando e igualando el partido por 3-3 ante el Philadelphia Union.
El equipo dirigido por Javier Mascherano estuvo contra las cuerdas durante gran parte del encuentro, mostrando nuevamente fragilidades defensivas que lo tienen en una racha preocupante: cuatro partidos sin ganar, con dos empates y dos derrotas, y apenas un triunfo en sus últimos ocho compromisos.
Sin embargo, a los 88 minutos, apareció Messi con su magia habitual: un zurdazo perfecto por encima de la barrera que se clavó en el ángulo y desató la locura entre los hinchas del Inter. El joven ecuatoriano Allen Obando vio el partido desde el banquillo sin tener minutos.(D)
MB