En el distrito educativo de Esmeraldas, el inicio del nuevo año lectivo comenzó este 12 de mayo en los planteles fiscales, luego de haber sido postergado a causa del sismo de magnitud 6,1 ocurrido en abril.
Durante el primer día, las actividades estuvieron centradas en la elaboración de estadísticas, el registro de matrículas y la verificación del estado de las aulas y del mobiliario. Los estudiantes de Educación General Básica y primer curso de Bachillerato iniciaron las clases, mientras que se espera una mayor asistencia estudiantil el miércoles 14 de mayo.
Según docentes de la unidad educativa Hispano América, estos primeros días también se están utilizando para capacitar al personal educativo. En el plantel Roberto Luis Cervantes, que sufrió daños estructurales por el sismo, los 620 estudiantes serán reubicados en dos bloques.
Padres de familia como Eliza Reyes aprovecharon este inicio para inscribir a sus hijos y adquirir uniformes y útiles escolares en los comercios locales.
Aunque las instituciones fiscomisionales y particulares también comenzaron clases el 12 de mayo, hubo escasa presencia estudiantil. El Ministerio de Educación evaluó 22 establecimientos afectados por el terremoto, y tras las inspecciones, solo tres presentaron problemas: Luis Prado Viteri, Ricardo Paredes y Nocturno UNE.
Se estima que más de 50.000 alumnos asistirán a clases en 139 planteles del cantón Esmeraldas. En cuanto a medidas sanitarias, los docentes afirmaron que se mantienen protocolos similares a los aplicados durante la pandemia de COVID-19, incluyendo el uso de mascarillas y coordinación con el Ministerio de Salud Pública (MSP) para vacunar a los estudiantes con autorización de sus representantes.
En Muisne, antes del regreso a clases, se lleva a cabo una campaña de control vectorial para prevenir enfermedades transmitidas por insectos. Las labores incluyen fumigación, termonebulización y fumigación intradomiciliaria, con apoyo de autoridades locales, rectores y dirigentes barriales.
KG