El Ejército ecuatoriano confirmó la identidad del guerrillero abatido en Alto Punino, zona donde ocurrió la emboscada que dejó once militares fallecidos. Se trata de alias Compadre, quien operaba como comandante de los Comandos de la Frontera en Ecuador, organización narcodelictiva integrada por disidentes de las FARC.
La identificación del insurgente fue posible gracias al intercambio de información con agencias de inteligencia y seguridad de Colombia, país de donde proviene esta agrupación armada. Según detalló el Ejército, Compadre era el encargado de controlar operaciones ilícitas de minería ilegal y de cobrar extorsiones —conocidas como “vacunas”— a los mineros de la región.
Alias Compadre habría liderado un grupo de al menos 30 guerrilleros fuertemente armados con fusiles de asalto, lanzagranadas y explosivos. Además, contaban con drones y equipos de comunicación para vigilar los movimientos de las fuerzas armadas ecuatorianas.
La organización mantenía también una alianza operativa con el grupo delictivo ecuatoriano Los Lobos, presente en zonas mineras y vinculado al narcotráfico.
El Gobierno nacional había responsabilizado directamente a los Comandos de la Frontera por el ataque armado ocurrido en la provincia de Sucumbíos. Sin embargo, desde Colombia, voceros de esta agrupación negaron su participación en el hecho.
Por su parte, el comandante del Ejército ecuatoriano, Henry Delgado, aseguró que la operación en la que fueron emboscados los militares fue coordinada con la Agencia de Regulación y Control de Energía y Recursos Naturales No Renovables (Arcom). Sin embargo, reconoció que aún existen dudas sobre cómo se perpetró el ataque, por lo que instó a que las investigaciones avancen para esclarecer lo sucedido.
“El Ejército no descansará hasta erradicar las amenazas que atentan contra la estabilidad del país”, puntualizó la institución en su pronunciamiento.
KG