El monseñor y cardenal Luis Cabrera, arzobispo de Guayaquil, expresó su satisfacción y esperanza tras la elección de Robert Prevost como nuevo papa de la Iglesia católica, quien asumió el nombre de León XIV. Cabrera, quien participó por primera vez en un cónclave, describió la experiencia como un momento espiritual y fraterno inolvidable.
Desde el Vaticano, Cabrera compartió con el medio Teleamazonas que la votación se desarrolló en un ambiente de serenidad y consenso entre los 133 cardenales electores. Tras la cuarta ronda de votación, se alcanzó la mayoría necesaria, generando una espontánea ovación que, según sus palabras, “llenó el corazón de todos de alegría”.
El cardenal ecuatoriano recordó su cercanía previa con el ahora papa León XIV, con quien coincidió en eventos del Sínodo en 2023 y 2024. Lo describió como un hombre humilde, cercano, con profundo compromiso con los pueblos y las realidades sociales del mundo: “Es un norteamericano con alma de latinoamericano”, dijo, destacando su trayectoria misionera y su sensibilidad pastoral.
Durante un almuerzo en el Vaticano, Cabrera compartió con el nuevo sumo pontífice recuerdos de su paso por Chiclayo, Perú, y conversaron sobre raíces familiares y devociones religiosas. Cabrera le recordó al papa la veneración al Señor de los Milagros y a la Virgen de la Nube, con fuerte presencia en Perú y Ecuador, y le extendió una invitación para visitar el país andino.
El arzobispo concluyó destacando el perfil del nuevo papa como un líder que escucha, actúa y se deja tocar por el sufrimiento humano, convencido de que continuará con el legado pastoral de Francisco. “Es el pastor apasionado por Cristo y por su pueblo”, resumió.
KG
