Familias de los barrios San José Obrero y La Ceiba, en Esmeraldas, continúan recuperándose tras el sismo de magnitud 6.1 que sacudió la ciudad el pasado viernes. La familia Santana, con ayuda de vecinos, evacuó materiales destruidos en medio del lodo acumulado por las lluvias. Cerca de allí, los Galarza sufrieron el colapso de un muro y un poste de electricidad, dejando a un habitante herido y obligando su traslado a un sanatorio.
Los residentes expresaron temor ante el posible desprendimiento de más estructuras, mientras que el acceso vial entre San José Obrero Alto y La Ceiba está en riesgo de colapso debido al debilitamiento del terreno. En respuesta, el alcalde Vicko Villacís anunció que donará su sueldo del mes y gestionará materiales de construcción para ayudar a las familias afectadas.
El Municipio de Esmeraldas desplegó maquinaria para remover escombros. Holger Holguín, director municipal de Obras Públicas, indicó que el 90 % del material disperso ya ha sido retirado de los puntos críticos en la ciudad.
KG
