La empresa concesionaria Interagua respondió a las acusaciones emitidas por asambleístas del movimiento oficialista Acción Democrática Nacional (ADN), quienes cuestionaron la calidad del agua potable en Guayaquil. La compañía calificó los señalamientos como infundados y aseguró que el servicio de agua cumple con los estándares establecidos por la normativa vigente.
Ilfn Florsheim, portavoz de Interagua, rechazó firmemente las declaraciones del legislador Ferdinand Álvarez, quien afirmó que los habitantes de Guayaquil estaban consumiendo «veneno», basándose en un informe emitido por la Agencia de Regulación y Control del Agua (Arca).
Los asambleístas anunciaron que iniciarán un proceso de fiscalización en la Asamblea Nacional y presentarán una denuncia ante la Fiscalía contra el Municipio de Guayaquil, alegando supuestas irregularidades en los niveles de cloro residual y pH detectados en muestras tomadas el 14 de marzo en sectores como Samanes 7, Puerto Santa Ana y Suburbio Oeste.
Álvarez calificó los resultados como un “riesgo significativo para la salud pública”.
Sin embargo, Florsheim refutó esas afirmaciones, asegurando que “las declaraciones del asambleísta carecen completamente de sustento”. Además, presentó datos comparativos entre el informe de Arca y los análisis realizados por Interagua en los mismos lugares y fechas, que demostrarían la conformidad del servicio con los parámetros requeridos.
KG
