En las provincias de Imbabura y Pichincha se instalarían las primeras unidades de vivienda en forma de cápsulas compactas. El nombre del proyecto es Vía Láctea.
Cuicocha, en la provincia de Imbabura, sería uno de los lugares escogidos, al igual que Mindo, en el noroccidente de Pichincha.
La iniciativa nació en la pandemia con el objetivo de salir del encierro, producto de la enfermedad del COVID-19. La idea era colocar un espacio de la ciudad en un terreno familiar en Cuicocha, pero se analizó el potencial del producto para evitar la contaminación y favorecer al sector turístico.
El proyecto está a cargo del grupo Zafra Arquitectos, una empresa que se encarga del diseño y construcción de proyectos residenciales y comerciales con oficinas en Ecuador, Estados Unidos y México.
La vivienda es una pieza compacta en la que puede haber sala, comedor, cocina, baño y convivir hasta seis ocupantes.
La cápsula está hecha de acero galvanizado y revestida con aluminio compuesto con alta durabilidad. Hay una capa de poliuretano que cubre la estructura para mantener la energía y que las bajas temperaturas no afecten a quienes la habiten.
Tiene pisos radiantes como un mecanismo de calefacción, además de que hay un sistema de climatización. En este caso, se usa domótica, puesto que los comandos de operación de la casa funcionan con un sistema inteligente que también se puede controlar por voz. Los vidrios son laminados y templados para que la energía se conserve y que haya filtración de rayos ultravioletas.

No es una casa rodante, pues es una estructura que está sujeta y para ser instalada requiere de una plataforma para montarse y desmontarse con una grúa. Además de que necesita un camino para ser transportada.
La estructura mide 3,20 metros de ancho y 11,60 metros de largo, con un área de 38 metros cuadrados, que incluye un balcón. Pesa seis toneladas.
A la estructura, que es importada desde China, se le colocan electrodomésticos como refrigerador, congelador, cocina de inducción, así como instalaciones eléctricas y sanitarias por pedido del cliente. Los ventanales permiten tener una visualización de 360 grados.
Para el tratamiento de aguas servidas se instala un biodigestor, que es un tanque en el que se va descomponiendo lo almacenado. Para el agua, esta puede ser reunida en un tanque de plástico y con una bomba usarla en la casa. En el caso de la energía, se adaptan baterías y paneles solares o plantas eléctricas o de combustible.
La estructura debe estar sujeta a seis puntos rígidos.

La casa modelo llegó a Ecuador en diciembre de 2024. Cuesta $ 78.000, más el impuesto al valor agregado (IVA), pero el precio final dependerá del lugar donde se la va a instalar.
Está diseñada para lugares como reservas naturales, playas, selvas, montañas, dado que sus materiales están hechos para resistir las cuatro estaciones a nivel mundial.
Para la colocación no se necesitan permisos, a no ser que sea en un área protegida. Esto último sería en acuerdo con la comunidad y/o el Ministerio del Ambiente, a decir de la empresa.
Para el proceso de instalación intervienen varios expertos: un ingeniero estructural para determinar cuál es el tipo de suelo que se requiere, el transportista del vehículo que llevará el armazón y la persona que manejará la grúa.
Las viviendas se importan dependiendo de una determinada temporada para evitar que el costo que cobran las navieras sea alto. Por el momento hay un pedido de diez.
En el caso de Cuicocha se las colocaría en una zona que no es protegida, mientras que en Mindo todavía no se define el sitio específico.
El nombre del proyecto Vía Láctea, según la empresa, es porque parece una cápsula espacial. (I)
Fuente: El Universo