Aquiles Alvarez alcalde de Guayaquil en su rendición de cuentas dio a conocer las obras que ejecuta en nuestra ciudad y como se proyecta hacia el futuro.
Guayaquil tiene una buena parte del cableado de sus diversos servicios colgado en postes. En algunos sectores ese cableado parece telarañas o tallarines que se cruzan en las esquinas.
Cambiar esa realidad y poner bajo tierra esos cables demandaría una inversión millonaria: $ 333 millones.
Esa cifra se desprende de un estudio que tiene el Municipio de Guayaquil y que mencionó este miércoles, 15 de enero, el alcalde Aquiles Alvarez.
El personero municipal indicó que hay un plan para ir “enterrando” ese cableado por zonas.
Alvarez mencionó que dentro del plan primero está la zona de Urdesa, en el norte de Guayaquil. Para ese objetivo se requieren $ 3,5 millones.
Esos procesos se iniciarán a subir este año para que el proyecto comience a adjudicarse en 2026.
“Estamos preparando un proceso importante para ir a los (organismos) multilaterales y obtener los recursos para ver si de una vez desenredamos eso”, afirmó.
Alvarez explicó que esto no solo implica ordenar este cableado, sino también generar recursos para el Municipio. “Con estos ductos (que se instalarán) se van a cobrar recursos por las operadoras que deberán pagar”, dijo.
El alcalde de Guayaquil, Aquiles Alvarez, señaló este miércoles, 15 de enero, que cree que el Gobierno tiene la intención de retirar la transferencia del parque Samanes.
La Municipalidad de Guayaquil recibió la competencia del parque durante el gobierno de Guillermo Lasso.
Alvarez cuestionó que algunos permisos ambientales no se hayan otorgado por parte del Gobierno. “Todo lo que pedimos nos frenan”, se quejó este miércoles.
Dijo que tienen el proyecto de la nueva autopista que conduce al aeropuerto de Daular, en la vía a la costa, pero aún no hay respuesta del Ministerio del Ambiente.
Tampoco tienen el aval para el plan de manejo ambiental del parque Samanes. Y fue en ese punto, durante su enlace radial, que mencionó la aparente pretensión del Gobierno de dar marcha atrás a la transferencia de ese espacio.
Alvarez también dijo que existe el rumor de que el Ministerio del Ambiente les quiere retirar la potestad de emitir licencias ambientales.
Dentro de las obras que ejecutará el Municipio, el alcalde anunció que se realizará el sistema de alcantarillado para Pascuales, a un costo de más de $ 30 millones.
También sostuvo que este año se lanzará el proceso para el diseño de la nueva malla vial de la vía a la costa. Esto incluye vías para la nueva ciudad que se expande hacia ese sector.
Recordó que en esa zona se están realizando obras por más de $ 45 millones. Mencionó el anillo vial, el nuevo acceso a Chongón y los pasos peatonales.
El alcalde de Guayaquil, Aquiles Alvarez, dijo este miércoles que hasta este 19 de enero prevén que todos los semáforos de la ciudad estén operando con normalidad.
Desde hace algunas semanas, en algunos sectores de la ciudad hay semáforos apagados y con intermitencia.
El Municipio indicó que durante los apagones, el sistema de semáforos quedó afectado.
“A muchos, lamentablemente, se les quemó la refri, la tele, el aire… A Guayaquil se le quemaron los semáforos”, dijo el alcalde Aquiles Alvarez días atrás.
De los 6.500 semáforos que tiene la ciudad, el 80 % tenía problemas con intermitencia y otros están quemados por los cortes de energía.
“Vamos a tener el 100 % de los 6.500 semáforos hasta el 19 de enero, si Dios lo permite. No vamos a tener más problema con ese tema”, dijo en la radio KCH.
Alvarez señaló que más de 40 intersecciones se vieron afectadas por este tema
Durante estas semanas, agentes de la ATM han tratado de atender las intersecciones afectadas, especialmente en las llamadas horas pico.
En diciembre pasado, debido a los problemas que habían ocasionado los apagones en la Metrovía y el sistema de semaforización, la Empresa Pública Municipal de Tránsito y Movilidad de Guayaquil decidió declararse en emergencia para atender esta situación.
Con los cortes de energía y semáforos apagados, la entidad indicó que eso ha incidido en un incremento de los siniestros de tránsito, lesionados y fallecidos. Además, cuando no había luz, las estaciones de la Metrovía tenían problemas para los accesos.
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