La actriz Gal Gadot reveló recientemente a través de una publicación que realizó en sus redes sociales una experiencia médica preocupante que enfrentó durante su cuarto embarazo. La estrella israelí se sinceró y compartió con sus admiradores que fue diagnosticada con un coágulo cerebral mientras esperaba a su cuarta hija.
La actriz, reconocida mundialmente por su papel como Wonder Woman, explicó que la situación comenzó cuando experimentó dolores de cabeza intensos que calificó como “insoportables”. Estos síntomas persistentes llevaron a una evaluación médica que culminó en el descubrimiento del coágulo en su cerebro.
En febrero, durante mi octavo mes de embarazo, me diagnosticaron un enorme coágulo de sangre en mi cerebro. Durante semanas, había tenido dolores de cabeza insoportables que me encerraron en la cama, hasta que finalmente me sometí a una resonancia que reveló la aterradora verdad. En un momento, mi familia y yo nos enfrentamos a lo frágil que puede ser la vida. Fue un duro recordatorio de lo rápido que todo puede cambiar, y en medio de un año difícil, todo lo que quería era aguantar y vivir”, comenzó.
Gal Gadot agregó que tuvo que ser operada de emergencia y un mes después nació su hija Ori, cuyo nombre significa ‘mi luz’.
“Fuimos corriendo al hospital, y en cuestión de horas, me sometieron a una cirugía de emergencia. Mi hija, Ori, nació durante ese momento de incertidumbre y miedo. Su nombre, que significa “mi luz”, no fue elegido por casualidad. Antes de la cirugía, le dije a Jaron que cuando llegara nuestra hija, ella sería la luz esperándome al final de este túnel”, aseguró.
Para finalizar, la actriz compartió que está agradecida con los doctores y que actualmente está completamente curada, aunque asegura que esto le dejó una gran lección de vida.
“Gracias a un extraordinario equipo de médicos en @cedarssinai y semanas de dedicación de atención, lo logré y empecé el camino hacia la recuperación. Hoy, estoy completamente curada y llena de gratitud por la vida que me han devuelto”.
“La conciencia importa. No tenía ni idea de que 3 de cada 100,000 mujeres embarazadas en el grupo de más de 30 años son diagnosticadas con CVT (desarrollar un coágulo de sangre en el cerebro).
Es muy importante identificarse pronto porque es tratable. Aunque es raro, es una posibilidad, y saber que existe es el primer paso para abordarla. Compartir esto no es para asustar a nadie sino para empoderar. Si incluso una persona se siente obligada a tomar medidas por su salud debido a esta historia, habrá merecido la pena compartirla”.
Fuente: El Diario NY
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