El incendio Franklin ha devastado alrededor de 1,200 hectáreas en Malibú, California, destruyendo al menos siete estructuras, dañando otras ocho y afectando a más de 20,000 personas, según el Departamento de Bomberos del Condado de Los Ángeles. Los elementos de seguridad enfrentan vientos de hasta 80 km/h y una humedad de apenas 5-10%, por lo que el fuego continúa avanzando sin estar contenido por completo. Esta situación ha obligado a las autoridades a duplicar el número de bomberos que combaten el siniestro.
El incendio comenzó cerca de Malibu Canyon Road y Station Boundary, al sur del área de Piuma, poco después de las 22:50 del lunes, según el Departamento de Bomberos del Condado de Los Ángeles en declaraciones recogidas por CBS. Alimentado por los vientos de Santa Ana, el fuego se expandió rápidamente hacia el campus de la Universidad Pepperdine y áreas residenciales como Malibu Road y Sweetwater Mesa, reportó NBC. Para la tarde del martes, había consumido más de 1,200 hectáreas, según datos de las autoridades estatales.
Ahora más de 1,500 bomberos trabajan en el combate al incendio con apoyo de helicópteros, buldóceres y equipos especializados, de acuerdo con datos publicados por NBC. El gobernador de California, Gavin Newsom, aseguró la asignación de recursos adicionales al obtener un Grant de Manejo de Incendios de FEMA.
¿Qué afectaciones han tenido las víctimas del incendio?
Los daños estructurales incluyen la destrucción de siete edificaciones y daños parciales en ocho más, pero una inspección más detallada se llevará a cabo en el transcurso de este miércoles, de acuerdo con NBC. Mientras tanto, más de 20,000 residentes han sido evacuados o están bajo advertencias de evacuación. La ciudad de Malibú, sin electricidad en varias zonas, ha enfrentado interrupciones en las comunicaciones, incluso en servicios móviles, según el jefe de bomberos, Anthony Marrone. Hasta ahora, al menos 11,050 clientes se han quedado sin energía, pero la cifra podría superar los 38 mil.
Entre los evacuados se encuentran estudiantes de la Universidad Pepperdine, quienes han recibido órdenes de resguardarse en instalaciones del campus debido a los cortes de energía. El protocolo, aprobado por los bomberos del condado, garantiza comida, agua y refugio seguro.
Por su parte, el Departamento del Sheriff del Condado de Los Ángeles lleva a cabo evacuaciones puerta a puerta y patrullas de seguridad para proteger las propiedades abandonadas y evitar que sean víctimas del vandalismo mientras los afectados permanecen en refugios y albergues. “No toleraremos que nadie revictimice a esta comunidad”, afirmó la capitana Jennifer Seetoo, en declaraciones recogidas por NBC.
Mientras tanto, las escuelas en Malibú permanecerán cerradas hasta el jueves 12 de diciembre, según el distrito escolar. Esto afecta a Webster Elementary, Malibu Elementary, Malibu Middle y Malibu High School. Sin embargo, las escuelas de Santa Mónica seguirán abiertas, informó CBS.
¿Cuáles son los refugios disponibles por el ‘Franklin Fire’?
Las autoridades han establecido refugios para apoyar a los residentes desplazados y sus mascotas:
- Santa Monica-Malibu Unified School District: 2828 4th St., Santa Mónica, CA.
- Calabasas Community Center: 27040 Malibu Hills Rd., Calabasas, CA.
- Pierce College (animales grandes): 6201 Winnetka Ave., Woodland Hills, CA.
- Agoura Animal Care Center (animales pequeños): 29525 Agoura Rd., Agoura Hills, CA.
¿Qué carreteras han cerrado por el incendio en Malibú?
Varias vías principales en Malibú han sido cerradas para garantizar la seguridad:
- Malibu Canyon Road, desde Mulholland Drive hasta la carretera de la costa del Pacífico (PCH).
- PCH: Cerrada entre Topanga Canyon Boulevard y Kanan Dume Road.
- Topanga Canyon Boulevard: Solo tráfico local permitido.
Advertencia a conductores: Se recomienda evitar la zona y utilizar la autopista 101 para desplazarse entre Santa Mónica y Ventura.
¿Por qué está siendo tan difícil contener el incendio en Malibú?
El incendio ha sido alimentado por los vientos de Santa Ana, que han alcanzado ráfagas de hasta 80 km/h, y por una humedad extremadamente baja, de entre 5 y 10%. Aunque las condiciones podrían mejorar hacia el miércoles, los riesgos persisten, según el meteorólogo Paul Deanno de KCAL News. Las temperaturas más frescas previstas para finales de semana podrían ayudar en los esfuerzos de contención, declararon las autoridades.
Aunque los bomberos planean aprovechar las temperaturas más bajas y la mayor humedad nocturna para avanzar en la contención, la amenaza de condiciones impredecibles persiste. El Departamento de Bomberos advierte que la baja humedad y las ráfagas aisladas podrían complicar los esfuerzos.
Con la ayuda de FEMA, el estado y equipos de emergencia locales, la prioridad sigue siendo proteger vidas y propiedades en esta comunidad que aún recuerda las devastadoras pérdidas del incendio Woolsey en 2018.
Fuente: Infobae