Monseñor Luis Cabrera, arzobispo de Guayaquil, se convirtió este sábado, 7 de diciembre, en uno de los 21 nuevos cardenales de la Iglesia Católica, en un acto desarrollado en la Basílica de San Pedro en Ciudad del Vaticano.

El evento estuvo dirigido por el Papa Francisco, quien los animó a “seguir el camino de Jesús”, rechazando las seducciones del prestigio y el poder, según Aciprensa, una agendia de noticias católicas.

Arquidiócesis de Guayaquil comparte la carta que el papa Francisco envió a monseñor Luis Cabrera ante su designación como nuevo cardenal de la Iglesia

La agencia de noticias informó que tras la procesión de entrada de los nuevos cardenales y luego de la primera invocación del Santo Padre, el Cardenal Angelo Acerbi, italiano de 99 años, dirigió unas palabras.

Acerbi destacó la “profunda gratitud al Sumo Pontífice y un sincero deseo de servir en la unidad eclesial” entre los nuevos cardenales y expresó su deseo de “mirar al futuro con esperanza y ver un mundo finalmente pacificado”.

Luego de un momento de oración, el Papa Francisco anunció la creación de los 21 nuevos cardenales. Al llamar a cada uno se fueron poniendo todos de pie, tras escuchar su nombre pronunciado en latín.

Después los 21 hicieron la profesión de fe y rezaron juntos el Credo, también en latín. Cada uno hizo un acto de obediencia y fidelidad al Santo Padre.

Luego del juramento, cada uno de los cardenales recibió, de rodillas, el birrete (sombrero), la imposición del anillo en el dedo anular en la mano derecha, y la bula de creación cardenalicia en la que está su título correspondiente.

El Santo Padre destacó que “lo que debe animar su servicio como cardenales es el riesgo del camino, la alegría del encuentro con los demás, el cuidado de los más frágiles” y remarcó que su misión es “ser testigos de fraternidad, artesanos de comunión y constructores de unidad”.

En una “sociedad obsesionada con la apariencia y la búsqueda de los primeros lugares”, el Papa Francisco los alentó a caminar juntos en el camino de Jesús “con humildad, con asombro, con alegría”.

Cabrera, de 69 años, quien también es presidente de la Conferencia Episcopal Ecuatoriana, es uno de los 21 nuevos cardenales anunciados por el papa Francisco y el sexto representante ecuatoriano.

Previo a su viaje y en una entrevista con este Diario, Cabrera explicó que los cardenales son principalmente los colaboradores más cercanos del papa, en temas muy concretos.

“Seremos parte del grupo de consultores para algunos temas sobre evangelización, también algunos temas administrativos. Son personas de los cinco continentes, cada persona comunicará desde su experiencia. Por ejemplo, para mí, en ese sentido, será una gran responsabilidad llevar de alguna manera la voz de Guayaquil o de Ecuador, así como otras personas llevan la de otros países. Esa es la primera función”, dijo.

La segunda función es la más delicada, es en caso de renuncia del papa o de fallecimiento, nombrar al nuevo papa. Entonces, son los cardenales, los menores de 80 años, los que tienen esta misión, agregó. (I)