Según un reporte de Kantar Ecuador, tomando solo en cuenta los más de 10 días de septiembre de 2024, cuando iniciaron los apagones de entre 6 a 8 horas, se determinó que el 64% de los hogares ecuatorianos, es decir 6 de cada 10, redujeron su consumo de alimentos, bebidas y lácteos.
«Dentro de la canasta de consumo masivo, ni siquiera la subida del IVA al 15% ha tenido un impacto tan grande en el consumo de los productos congelados (categorías con cadena de frío) como los apagones. Hay que recordar que el 55% de los productos de la canasta de consumo masivo no gravan IVA», explicó Miguel De La Torre, gerente general de Kantar Ecuador.
Del total de hogares que ha reducido su consumo, el 22% dice que se les han dañado productos y un 21% asegura que ha pasado a priorizar la compra de productos básicos y dejar de consumir otro tipo de bienes. Asimismo, un 19% de las familias ha registrado un aumento de precios que golpea su presupuesto diario y mensual.
Apagones nacionales: familias solo compran lo necesario
De la Torre puntualizó que el 55% de los hogares, a partir de los apagones, solo compra lo necesario para que no se les dañe.
«Estamos evidenciando que se está porcionando más la comida. Por ejemplo, en las proteínas ya no compras el kilo, sino la libra; en las salchichas compras 3 y ya no 12; los quesos compras el formato más pequeño. Eso se puede evidenciar en septiembre cuando en embutidos se pasó del 44% al 48% de compra de formatos pequeños. En octubre el salto debe ser mayor», acotó De la Torre.
En el caso del queso, se consume cada vez más el formato mediano y el más grande se va al piso.
«Estos está obligando a las empresas a ofrecer más formatos pequeños, del día a día», añadió el gerente general de Kantar.
De la Torre contó que en enero de 2024, de la mano del aumento de la inseguridad, la gente se refugió más tiempo en casa, bajó drásticamente su consumo afuera y comenzó a comprar en formatos más grandes para hacer menos viajes al supermercado o la tienda.
Con la subida del IVA en abril de 2024, y el aumento de los costos, esa tendencia comenzó a cambiar; pero es con los apagones que se revierte completamente la tendencia y ahora los hogares compran en menores cantidades, pero privilegiando los productos básicos.
Una familia ecuatoriana gasta, en promedio, alrededor de $240 al mes en productos de consumo masivo en Ecuador. La crisis eléctrica ha hecho que consuman menos, y en cantidades menores por cada compra. (JS)
DATO.- La llamada canasta de consumo masivo, que incluye 95 categorías de productos entre alimentos, bebidas, lácteos, aseo personal, entre otros, mueve alrededor de $7.000 millones al año en Ecuador.
Diario La Hora